Maltrato en el trabajo hospitalario, agresiones físicas y verbales de pacientes, carga extraordinaria de horas laborales, salarios insuficientes... Es el cóctel que, empeorado por la pandemia y una crisis económica, está detrás de la fuga de médicos que amenaza al sistema sanitario turco.
Así lo ha advertido el Colegio de Médicos de Turquía (TTB), según el cual miles de médicos huyeron al extranjero en los últimos dos años y unos ocho mil se preparan para irse.
La TTB ha lanzado un llamamiento al Gobierno para que tome medidas urgentes que detengan la emigración del personal sanitario.
Una fuga de miles
Según el profesor Süleyman Kaynak, miembro de la junta ejecutiva de la sección de Izmir de la TTB, más de 3.000 médicos abandonaron Turquía en los últimos dos años para trabajar en otros países y unos 8.000 estudiantes de la Facultad de Medicina están planeando emigrar a Europa, sobre todo a Alemania.
"Nuestros colegas están en busca de trabajo fuera del país. La mayoría de los médicos con los que hemos hablado tienen la misma idea", indicó Kaynak al diario Cumhuriyet este miércoles.
También Selçuk Candansayar, que imparte clases en una Facultad de Medicina de la Universidad de Gazi, en Ankara, dijo a Efe que salir del país es un sueño para la mayoría de sus mejores estudiantes y asistentes.
Se van los mejores
"Este país gasta cerca de un millón de dólares para educar a un médico. Los mejores de nuestros graduados vienen a verme cada semana para preguntarme cómo pueden ir a trabajar al extranjero", dice el profesor tras recordar una reciente investigación de la TTB según la cual 80 médicos turcos emigran cada mes.
Salarios bajos, extrema carga de trabajo, violencia psíquica ('mobbing') y física, discriminación e inseguridad son las causas de esta tendencia, según el citado estudio, realizado el pasado mes con encuestas a más de 6.000 médicos en todo el país.
El 86 % de los interrogados dijo haber sufrido violencia física o verbal por parte de los pacientes o sus familiares, un 76 % se quejó de no haber recibido pago por las horas extras durante la pandemia, el 68 % destacó la falta de tiempo para atender adecuadamente a los enfermos y un 45 % denunció salarios insuficientes.
"La mayoría de mis colegas tienen a más de cien pacientes en un día. ¿Cómo va a ser posible atender adecuadamente a tantos pacientes?", plantea Yilmaz Kurt, médico de la unidad de urgencias de un hospital privado de Ankara, en declaraciones a Efe.
El doctor recordó el aumento de la carga de trabajo durante la pandemia de la covid-19, enfermedad que en Turquía ha sufrido hasta ahora el 34 % de los médicos de urgencia, según datos de la TTB, incluido el propio Kurt.
Violencia en los hospitales
Según Kurt, la violencia es ya rutina en los hospitales, a los que algunas personas acuden armados.
"El 90 % de los médicos de la unidad de emergencias sufrieron algún tipo de violencia", afirma.
La investigación de la TTB recoge que sólo el año pasado se reportaron cerca de 12.000 casos de violencia contra médicos en el país euroasiático.
"Se pueden encontrar médicos y cirujanos turcos en casi todas las clínicas de Alemania", afirma por su parte Kenan Ipek, cirujano responsable de la coordinación de las unidades de emergencia de algunos hospitales privados de Estambul,
Consultado por Efe, Ipek confirmó conocer varios médicos que se fueron a trabajar a Europa occidental.
"Nuestros colegas se van por las malas condiciones de trabajo, la violencia y la inestabilidad de la economía. No ven un futuro mejor aquí para ellos y sus hijos. Y todo ha empeorado con la pandemia", afirma.
Según la TTB, frenar la emigración de los médicos es ahora una prioridad para el sistema sanitario turco.
Para ello, es necesario "detener la violencia, disminuir las horas de trabajo y mejorar los salarios", resaltó la asociación.