El número de fallecidos por la Covid-19 en Estados Unidos ha superado este miércoles los 750.000, de acuerdo con los datos de la Universidad Johns Hopkins. El número de muertes a causa de la pandemia ya superó la población total de estados como Alaska, Vermont o Wyoming, así como de la capital del país, Washington, según señala The Washington Post.
La variante Delta del coronavirus, que se propagó en Estados Unidos este verano, afectó particularmente a los estados con los porcentajes más altos de personas no vacunadas, lo que provocó un aumento de las muertes. Mientras tanto, la cifra total de casos de la Covid-19 ascendió a 46.233.867.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, alentó este miércoles a vacunar contra la Covid-19 a todos los niños estadounidenses de entre 5 y 11 años, pese al escepticismo de algunos padres sobre esa medida, recién autorizada en el país.
Biden celebró como "un enorme paso adelante" la decisión de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de autorizar este martes el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer/BioNTech entre los menores de entre 5 y 11 años.
"La semana que viene tendremos suficientes vacunas y suficientes lugares para administrarlas, y los padres podrán programar citas para poner la primera vacuna a sus hijos", dijo Biden en una comparecencia en la Casa Blanca.
El presidente prometió que el Gobierno estadounidense tiene "suministros suficientes" para vacunar a "absolutamente todos" los niños de esas edades, y afirmó que esas dosis estarán disponibles en 20.000 clínicas pediátricas y farmacias a partir del 8 de noviembre.
"Esta vacuna es segura y eficaz, así que vacunen a sus hijos para protegerles a ellos, proteger a otros y detener la propagación [de la Covid-19], para ayudarnos a acabar con esta pandemia", recalcó el presidente.
Biden trataba así de convencer a los padres que no tienen claro si quieren vacunar a sus hijos más pequeños, en un país donde sólo el 68% de la población mayor de 12 años -autorizada para recibir las vacunas- está inmunizada con la pauta completa, según los CDC.
El 30% de los padres de niños de entre 5 y 11 años se niegan a ponerles la vacuna, mientras que otro tercio de los progenitores de menores de esas edades son escépticos y prefieren "esperar un poco" antes de hacerlo, según un estudio publicado la semana pasada.
Sólo el 27% de quienes tienen hijos de ese rango de edad están deseosos de ponerles la vacuna en cuanto esté disponible, de acuerdo con ese estudio, desarrollado por la Kaiser Family Foundation.
Mensaje de tranquilidad
a directora de los CDC, Rochelle Walensky, quiso enviar este miércoles un mensaje de tranquilidad a los padres de niños de esas edades al argumentar que la vacuna es efectiva en un 91% y que sus efectos secundarios son "leves, limitados y similares a los observados en adultos".
"El efecto secundario más común fue dolor en el brazo", subrayó Walensky en una rueda de prensa.
De acuerdo con datos de los CDC, desde el comienzo de la pandemia se han registrado 1,9 millones de casos de la Covid-19 entre menores de entre 5 y 11 años, 8.300 hospitalizaciones y 94 muertes.
A ellos se suman 2.316 casos de niños de esas edades que han sufrido un síndrome inflamatorio multisistémico, que supone la inflamación de varios órganos y que es una complicación derivada de la Covid-19.
Unos 28 millones de niños tendrán la oportunidad de ponerse la vacuna de Pfizer/BioNTech, que en su caso será de 10 miligramos, un tercio de la dosis de los adultos.