Ruanda está "preparada" para acoger a los solicitantes de asilo que Reino Unido enviará al país en el marco del nuevo y polémico plan anunciado este jueves por el primer ministro británico Boris Johnson y que aún debe ser aprobado por el Parlamento del país.
"Hemos estado invirtiendo en infraestructuras capaces de recibir a los migrantes y acogerlos. Estamos preparados para recibirlos", dijo el ministro de Asuntos Exteriores ruandés, Vincent Biruta, durante una rueda de prensa tras la firma del acuerdo en Kigali con la ministra de Interior británica, Priti Patel.
"Es un acuerdo que durará cinco años y luego será evaluado", concretó Biruta.
La medida forma parte del plan dado a conocer este jueves por Johnson y destinado a combatir la inmigración ilegal y las bandas delictivas que explotan a las personas que buscan refugio cruzando el Canal de la Mancha, situado entre Francia e Inglaterra.
El plan, que ha sido criticado por los partidos de la oposición y las organizaciones no gubernamentales que ayudan a los refugiados, es parte del objetivo del político conservador de reformar el sistema de inmigración para recuperar el control de las fronteras tras el Brexit.
"Al reubicar a los migrantes en Ruanda e invertir en el desarrollo personal y el empleo para los migrantes, nuestras naciones están tomando grandes pasos abordar el desequilibrio en las oportunidades globales causante de la inmigración ilegal", dijo Patel en la capital ruandesa.
"La alianza priorizará la dignidad y los derechos de los migrantes, brindándoles una serie de oportunidades para construir una vida mejor en un país clasificado como uno de los más seguros del mundo. Los migrantes serán integrados en las comunidades", dijo la ministra británica.
Sin embargo, el director de derechos de los refugiados de Amnistía Internacional (AI), Steve Valdez-Symonds, alertó del mal historial en materia de derechos humanos de Ruanda.
"Enviar personas a otro país, y más a uno con un historial de derechos humanos tan pésimo, para el 'procesamiento' de asilo es el colmo de la irresponsabilidad", afirmó el directivo en unas declaraciones que publican medios locales británicos.
En virtud del plan, los trámites de asilo se harán en Ruanda y el Reino Unido espera conceder a ese país, miembro de la Mancomunidad Británica de Naciones (Commonwealth, excolonias), unos 125 millones de libras (150 millones de euros) durante un periodo de prueba, que estaría destinado en principio a hombres solteros.
Por otro lado, según detallaron los ministros de ambos países, los migrantes enviados a Ruanda tendrán plena protección bajo la ley del país, con igualdad de acceso a empleo y atención médica.
No obstante, Kigali no recibirá migrantes de países vecinos, como Burundi, República Democrática del Congo, Tanzania o Uganda y será un requisito imprescindible no tener antecedentes penales, dijo Biruta.
Según destaca la prensa local británica, el año pasado 28.526 solicitantes de asilo cruzaron el Canal en pequeños botes, un alza de 8.404 respecto a 2020, pero se estima que la cifra de este año supere los 30.000.