Las milicias chechenas de Kadyrov celebran la caída de Mariúpol: "Se completó la destrucción y la purga"

Este jueves, el ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú anunciaba la "liberación" de Mariúpol. La palabra elegida para describir la toma de control de la ciudad fue esa: liberación. Pero el mismo día, el líder checheno Ramzán Kadyrov publicaba en su cuenta de Twitter un vídeo en el que sus milicias celebraban "la destrucción y la purga" de Mariúpol. 

En el vídeo se ve como decenas de milicianos chechenos arengan a uno de sus líderes que anuncia la caída de Mariúpol: "La orden de destruir y purgar Mariúpol se ha cumplido. La orden del presidente Putin se ha cumplido, la orden de Kadyrov se ha cumplido".

Al fondo se ve un edificio completamente destruido y ardiendo aún, ejemplo de la destrucción que el ejército ruso y las milicias chechenas han sembrado en la ciudad. 

El control de Mariúpol por parte de las fuerzas rusas fue anunciado este jueves por Serguéi Shoigú a Vladimir Putin en una conversación transmitida por la televisión rusa. "Las Fuerzas Armadas de la Federación Rusa y las milicias de la república popular de Donetsk han liberado Mariúpol, lo que queda de las formaciones nacionalistas se refugiaron en la zona industrial de la planta Azovstal", dijo Shoigú.

El presidente ruso, Vladimir Putin, decidió entonces cancelar el asalto a la acería de Azovstal, para preservar la vida de los soldados rusos. "Tenemos que pensar en conservar la vida y la salud de nuestros soldado y oficiales. Considero inapropiado el asalto propuesto a la zona industrial. Ordeno cancelarlo. No hay necesidad de subir a estas catacumbas y arrastrarse bajo tierra a través de estas instalaciones industriales. Bloqueen esta área industrial para que una mosca no pueda pasar", dijo.

Sin embargo, Ucrania desmiente que la ciudad esté controlada por los rusos. El alcalde de la ciudad, Vadym Boychenko, inisite en que Mariúpol "sigue siendo ucraniana". Un defensor ucraniano en la acería de Azovstal, ha señalado a la cadena británica BBC que gran parte de la instalación está destruida, que hay muchos muertos y heridos, pero que "Mariúpol permanecerá bajo el control de Ucrania".

Svyatoslav Palamar, del regimiento de Azov, aseguró que los defensores ucranianos habían repelido oleadas de ataques rusos. "Siempre digo que mientras estemos aquí, Mariúpol permanecerá bajo el control de Ucrania", afirmó. Palamar dijo también que los rusos habían disparado contra la planta siderúrgica desde buques de guerra y que habían arrojado bombas "destructoras de búnkeres".

"Todos los edificios en el territorio de Azovstal están prácticamente destruidos" y "tenemos heridos y muertos dentro de los búnkeres. Algunos civiles están atrapados bajo los edificios derrumbados", dijo Palamar.

Fosas comunes

El alcalde de Mariúpol ha denunciado la existencia de una gran fosa común en la que han podido ser enterradas entre 3.000 y 9.000 cadáveres como prueba de las atrocidades cometidas por los rusos.

El alcalde ha enseñado imágenes de satélite recogidas por la empresa tecnológica Maxar en su cuenta de Telegram y señaló el parecido de la fosa común con las que se encontraron en Bucha, cerca de Kiev, en las que aparecieron cientos de cadáveres enterrados tras la retirada de las tropas rusas.

"En las fotos tomadas por Maxar el 9 de abril, el sector de la fosa común en Mangush (en el área de Mariúpol) es 20 veces más grande que la de Bucha", explica el mensaje. "Los rusos cavaron nuevas trincheras y las llenaron de cadáveres a diario durante todo el mes de abril. Nuestras fuentes informan que en las tumbas los cuerpos se colocan en varias capas", aseguró.

"El mayor crimen de guerra del siglo XXI se ha cometido en Mariúpol. Este es el nuevo Babyn Yar. Hitler luego mató a judíos, gitanos romaníes y eslavos. Y ahora Putin está destruyendo a los ucranianos. Ya ha matado a decenas de miles de civiles en Mariúpol. Y esto reclama una fuerte reacción de todo el mundo civilizado. Hay que detener el genocidio ", insistió el alcalde.

A mediados de marzo, los servicios públicos de la ciudad habían enterrado a unas 5.000 personas en varias zonas de Mariúpol y barrios periféricos. Según algunas estimaciones, el número total de muertos por el ejército ruso en Mariúpol puede sobrepasar las 22.000 personas.