El secretario general de la ONU, António Guterres, ha exigido que se detenga el "ruido de sables nucleares", diciendo que el mundo se encuentra en un "momento máximo de peligro" y que todos los países con armas nucleares deben comprometerse a "no usarlas por primera vez".
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El jefe de la ONU describió la situación en la planta de energía nuclear Zaporizhzhia de Ucrania, la más grande de Europa, donde continúan los bombardeos y los combates en la zona, como crítica.
En un comunicado emitido después de que los embajadores se reunieran en el consejo de seguridad de la ONU el lunes, Guterres enfatizó: "El ruido de sables nucleares debe detenerse... los responsables deben venir a la mesa de negociaciones para aliviar las tensiones y poner fin a la carrera armamentista nuclear, de una vez”.
En este momento de "máximo peligro para nuestro mundo", el secretario general enfatizó que "el futuro de la humanidad está en nuestras manos", e insistió en que la división sea reemplazada por el diálogo y la diplomacia, para "salvar a las generaciones venideras del flagelo de la guerra".
Argumentó que la negociación, el compromiso y la rendición de cuentas son necesarios para el futuro, atestiguando que, como representa a las naciones del mundo, la ONU es "la mejor esperanza de la humanidad para construir un mañana mejor y más pacífico".