El trasiego de personas que esperan a visitar los restos mortales de Isabel II a uno y otro lado del río Támesis es incesante. Las colas de gente que esperan poder acceder a la capilla ardiente de Isabel II superan los 5 kilómetros.
La policía de Londres ya advirtió de que los tiempos de espera podrían superar, incluso, las 35 horas, ya que se espera que en estos días pase cerca de un millón de personas ante los restos mortales de la monarca en Westminster Hall, en una capilla ardiente abierta las 24 horas.