Ucrania ha decretado este jueves la alerta aérea en todo el país por el lanzamiento de más de 30 misiles por parte de Rusia como respuesta al acuerdo de Kiev y sus aliados para el envío de tanques Leopard y M-1 Abrams al país.
Las defensas aéreas ucranianas han derribado más de 15 misiles y 24 drones kamikaze en todo el país, pero no han podido evitar que más de una decena de cohetes rusos alcanzaran infraestructuras energéticas clave y ciudades como Kiev, donde una persona ha muerto y dos han resultado heridas.
El ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, ha confirmado que se trata de un ataque "masivo" contra Ucrania.
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Kiev se ha quedado sin luz en algunos barrios por los daños en la planta de energía estatal que hay en Kiev. Esta situación también se ha repetido en Odesa, donde dos instalaciones energéticas han sido atacadas.
Los bombardeos han alcanzado también las regiones de Jersón, Zaporiyia, Dnipropetrovsk, Vinnitsa y Nikolaev. Las autoridades ucranianas en Jersón han confirmado la muerte de una persona y cuatro heridos en un ataque contra un edificio administrativo.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, ha confirmado que un misil ruso ha impactado contra un edificio no residencial en el distrito de Holosiiv. En el ataque ha muerto una persona y otras dos están heridas y ya hospitalizadas.
También se han notificado explosiones en el distrito de Dnipro, en Kiev, y se ha pedido a toda la población que permanezcan en sus refugios. El metro de Kiev se ha llenado de personas tras el lanzamiento de misiles.
Los sistemas de defensa aérea han logrado frenar más de los 15 misiles de crucero que Rusia ha lanzado sobre Kiev, según ha afirmado este jueves el jefe de la Administración Civil-Militar de Kiev, Serhiy Popko.
Entre los objetivos de Rusia también está Odesa. Esto no es en absoluto casual, ya que sería la respuesta de Moscú a la decisión de la UNESCO de incluir esta ciudad en su lista de Patrimonio Mundial, lo que le daría una protección reforzada en la Lista de Patrimonio Mundial en Peligro.
El gobernador de Odesa, Yuriy Kruk, ha denunciado que "el enemigo sigue disparando misiles contra territorio ucraniano desde cielo y mar". "Hay ya información sobre daños a múltiples objetos de la infraestructura energética crítica de Odesa. No hay víctimas. Las Fuerzas de Defensa Aérea operan en el territorio de Odesa, particularmente en el distrito de Odesa. Pedimos que permanezcan en los refugios, que no difundan detalles sobre los impactos en redes sociales y que esperen a la información oficial", ha zanjado.
Aviones de combate
Este lanzamiento masivo de misiles contra Ucrania coincide no sólo con el envío de tanques Leopard, que es para Rusia la constatación de la implicación total de los aliados en la guerra, también con la petición de Kiev de aviones de combate occidentales para "defender el cielo".
"Tenemos que cerrar ya nuestro cielo. Tenemos que defenderlo y esa es la prioridad número uno", ha manifestado Reznikov. "Después de eso, necesitamos obtener más vehículos armados, tanques, sistemas de artillería, drones...", ha añadido en una entrevista en la CNN.
Conscientes de que el envío de los carros de combate Leopard por parte de Alemania y varios países europeos, entre ellos España, y de los tanques M1-Abrams de Estados tardará meses, Ucrania prioriza ahora los aviones de combate y los añade a su "lista de deseos".
El motivo no es otro que las dudas sobre la eficacia de estos tanques. De hecho, el presidente Volodímir Zelenski ha condicionado la operatividad de los Leopard y los M1-Abrams a la cantidad que les suministren los aliados y a la velocidad de disponer de ellos. Además, es necesario formar a los soldados ucranianos en el manejo de estos vehículos, lo que ralentizará su uso en el campo de batalla.