Kadyrov, aliado de Putin, afirma que planea montar su propio batallón militar cuando acabe su mandato

Ramzan Kadyrov, el aliado del presidente ruso Vladimír Putin que dirige Chechenia, ha expresado este domingo que algún día planea establecer su propia compañía militar privada, al estilo del Grupo Wagner (los mercenarios liderados por Yevgeny Prigozhin).

El surgimiento de este batallón y otras fuerzas mercenarias fuera de las estructuras tradicionales de mando militar ruso ha despertado la preocupación entre los diplomáticos occidentales de que tales grupos algún día puedan representar una amenaza para la estabilidad en Rusia.

En una publicación en Telegram, Kadyrov dijo que Wagner, que ha estado luchando junto a las tropas rusas en Ucrania, había logrado "resultados impresionantes" y que las empresas militares privadas eran una necesidad.

"Podemos decir con confianza que Wagner ha demostrado su valía en términos militares y ha trazado una línea en las discusiones sobre si se necesitan o no tales empresas militares privadas", dijo Kadyrov, presidente de la República de Chechenia desde 2007.

"Cuando termine mi servicio al estado, planeo seriamente competir con nuestro querido hermano Yevgeny Prigozhin y crear una compañía militar privada. Creo que todo saldrá bien", dijo Kadyrov, de 46 años.

[Rusia rompe la defensa de Ucrania en Lugansk pero los Wagner avisan: "Tomar el Donbás costará dos años"]

Kadyrov y Prigozhin lideran fuerzas en Ucrania en gran parte de forma autónoma del mando militar de Rusia y son aliados incondicionales de Putin, pero también se han pronunciado en público en contra del liderazgo militar.

Tomando el ejemplo del grupo Wagner y su papel en la guerra de Ucrania (cada vez más destacado por las batallas en la ciudad de Bakhmut y la zona del Donbás), Kadyrov ha subrayado la labor de Prigozhin, conocido como "el cocinero de Putin" por su empresa de cáterin y famoso por este batallón que ha actuado en Siria o países africanos. 

Kadyrov es el hijo del expresidente checheno Akhmad Kadyrov, asesinado en un atentado con bomba en Grozni en 2004, formó una alianza tácita con Prigozhin, amplificando las críticas mutuas a los altos mandos militares de Rusia y pidiendo un enjuiciamiento más enérgico del conflicto. "Estos grupos son necesarios", remarcó el presidente checheno.