La joven política Elly Schlein dio la sorpresa este pasado domingo y se impuso en las elecciones primarias del Partido Demócrata (PD) italiano frente a quien fuera el candidato favorito en los sondeos, Stefano Bonaccini, tras un ajustado recuento.
Con el 80 % del voto escrutado, Schlein sumó el 53,8 % de los votos, con importantes victorias en el norte del país y áreas urbanas como Milan, mientras que Bonaccini sumó el 46,2 %.
"Lo hemos conseguido, hemos vencido. Hemos hecho una pequeña gran revolución. Es un mandato claro para cambiar de verdad", celebró la ganadora, de 37 años, con un discurso en la medianoche tras un ajustadísimo recuento.
[Las elecciones regionales en Roma y Milan serán el primer test para el Gobierno de Meloni]
Combatir la precariedad laboral, la desigualdad y la emergencia climática fueron los tres grandes retos que enumeró al comienzo de su intervención, en la que también destacó que será la primera mujer en liderar la formación hegemónica de la izquierda italiana.
Minutos antes, las palabras de Bonaccini, en las que asumió la derrota aún sin que se terminaran de revisar todos los votos, sirvió para confirmar a Schlein como la nueva secretaria general de la formación, informa Efe.
"Ella ha sido más capaz que yo de dar un sentido de renovación al Partido Demócrata", dijo. En torno a un millón de personas han votado en estas primarias, abiertas a la participación de todos los residentes en Italia mayores de 16 años.
Ninguno de los sondeos ni votos previos daban como vencedora a la candidata, que en 2015 llegó a abandonar la formación por sus desacuerdos con la línea marcada por el entonces secretario general, Matteo Renzi, a quien acusó de conducir el partido hacia el centro-derecha.
De madre italiana y padre estadounidense, Schlein ha ejercido como europarlamentaria, vicepresidenta regional de Emilia Romaña y diputada nacional. En su campaña prometió un giro a la izquierda contestataria e inaugurar en la formación un lenguaje fresco con el que movilizar a los jóvenes.
A pesar de su aparente buena relación con Bonaccini, en los últimos días de campaña había descartado ser su "número dos" en caso de derrota porque, según defendió, había "terminado el tiempo de un partido patriarcal".
Schlein tomará el testigo del ex primer ministro Enrico Letta (2013-2014), quien convocó las primarias después de que en las elecciones generales de septiembre el partido recibiera menos del 20 % de los sufragios frente al 26 % de los ultras de Hermanos de Italia
La nueva secretaria general asumirá como reto inmediato organizar una oposición fuerte al Ejecutivo conservador liderado por Giorgia Meloni y destacar en esa labor por encima del populista Movimiento 5 Estrellas (M5S), la tercera formación en el Parlamento, receptora de muchos de los votantes que el PD ha ido perdiendo en los últimos años.
Fundado en 2007, el PD gobernó Italia -con altibajos- entre 2013 y 2018 y volvió al Ejecutivo en 2019 con el M5S, tras el colapso del pacto de estos con la ultraderechista Liga, de Matteo Salvini.