Después de amenazar con destruir con "misiles" el Tribunal de La Haya tras la orden de arresto contra Vladímir Putin emitida por la Corte Penal Internacional, ahora Rusia hace la misma amenaza con el Bundestag y la Cancillería de Alemania. Además, advierte de que cualquier intento de detención del presidente ruso equivale a una "declaración de guerra".
Así lo ha señalado este jueves el vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia y expresidente del país, Dmitri Medvédev, que ha puesto sobre la mesa una hipotética visita de Putin a Alemania en la que fuera detenido tras la orden de la Corte Penal Internacional.
"Se trata de una situación que no va a suceder nunca, pero imaginémonos un instante que sí puede ocurrir", ha afirmado Medvédev en una entrevista con varios medios rusos. "Digamos que el jefe actual de una potencia nuclear -en referencia a Putin- viaja a Alemania y es arrestado. ¿Qué es eso? Es una declaración de guerra a la Federación de Rusia", agregó.
Si eso llegara a suceder, ha explicado Medvédev,"todos los equipos (bélicos) rusos" volarán en dirección al Bundestag, la Cancillería y otras instituciones germanas.
Orden de detención
La semana pasada, Alemania celebró la decisión de la Corte Penal Internacional de emitir una orden de arresto contra Putin como presunto responsable "del crimen de guerra de deportación ilegal de población (niños) y traslado ilegal de población (niños) de las zonas ocupadas de Ucrania a Rusia".
Los delitos de los que se le acusa ocurrieron al menos desde el 24 de febrero de 2022 en el "territorio ocupado de Ucrania", señaló la CPI, que considera que hay "motivos razonables" para creer que Putin tiene "responsabilidad penal individual" por el crimen de guerra que supone la deportación de menores.
Junto con la orden de detención contra el presidente ruso la sala de cuestiones preliminares de la CPI emitió también una segunda orden contra la comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, María Lvova-Belova, bajo la misma acusación.