Sara de Diego Brais Cedeira

La Fiscalía marroquí ha archivado la investigación sobre la tragedia del 24 de junio de 2022 en la frontera de Melilla en la que murieron 100 emigrantes, ante "la ausencia de indicios de delito" y tras constatar que hubo un "uso proporcional de la fuerza" por parte de los agentes marroquíes.

Esta es la misma conclusión a la que llegó la Fiscalía española, que también archivó la investigación tras no ver delito por parte de funcionarios españoles en esa tragedia, que ocurrió cuando cerca de 1.700 migrantes, la mayoría sudaneses, intentaron acceder a Melilla forzando la puerta del puesto fronterizo con la ciudad marroquí de Nador.  

Aquel intento costó la vida a 23 emigrantes, según las autoridades de Marruecos, y a 27 según la ONG marroquí Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH). Sin embargo Amnistía Internacional eleva los muertos al centenar. 

"Las investigaciones han demostrado que la intervención de las fuerzas públicas fue para repeler el ataque, el peligro que existía y mantener el orden con un uso proporcional de la fuerza, pese al carácter agresivo y violento de los emigrantes, su gran número y que poseían armas blancas", apuntan las fuentes de la Fiscalía marroquí a Efe. 

Estas fuentes también señalan que las lesiones que sufrieron los migrantes fueron consecuencia del "intento de atravesar a la fuerza la valla en medio de una intensa estampida y aglomeración" de personas y del "intento de escalar" el puesto fronterizo. En ningún caso se debieron a la fuerza empleada por los agentes marroquíes, como confirman varios informes. 

"Es lo que confirmaron los testimonios de los emigrantes escuchados y fue también corroborado por los resultados de la autopsia que se realizó a los cuerpos de los fallecidos", subrayaron las mismas fuentes. Dichos informes de la autopsia nunca fueron publicados. 

Así fue la avalancha en la que murieron una treintena de inmigrantes en Melilla

Marruecos provocó la tragedia 

Esta posición de la Fiscalía de Marruecos, que no ve indicios de delito por la muerte un centenar de migrantes, es totalmente opuesta al informe, publicado el pasado 18 de junio por EL ESPAÑOL, que acredita que el Ejército de Marruecos provocó la tragedia de la valla de Melilla.

Se trata de una investigación de las organizaciones internacionales Border Forensics, el Centro por la Defensa de los Derechos Humanos Iridia y la Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH). Con comparativa de imágenes satélite, testimonios de 30 supervivientes de la tragedia y una detallada cronología de los hechos, así como de material documental, los autores de este estudio señalan a las autoridades marroquíes por permitir a los inmigrantes que se congregasen en torno al monte Gurugú en los meses previos a la tragedia.

Después, Marruecos los reprimió para finalmente conducirlos a una trampa mortal sin salida, la valla que separa la ciudad autónoma del país africano.

El título del informe es La trampa de la frontera entre Nador y Melilla. En él se detalla, tal y como contó EL ESPAÑOL en marzo de 2022, la actitud de las tropas y la policía marroquí cambiaron por completo tras el viraje de Pedro Sánchez reconociendo el proyecto de Marruecos sobre el Sáhara Occidental.

Tal y como reveló este medio, el CNI poseía informes que señalaban que Marruecos había consentido que miles de inmigrantes intentasen aquel día cruzar el vallado. Tras semanas de represión y de violencia, miles de subsaharianos se lanzaron al mismo tiempo, desesperados, a cruzar el vallado.

Como refleja el informe, las pruebas que se han reunido apuntan a que la violencia ejercida por Marruecos en semanas anteriores fue deliberada, y que se les permitió después saltar el vallado de forma deliberada, de tal suerte que aquello era, en realidad, una emboscada mortal.

 "Las condiciones específicas del intento de cruce fronterizo fueron propiciadas por las autoridades marroquíes, que habían planeado con antelación la estrategia represiva desplegada el día de los hechos", relata el informe. 

"La represión que tuvo lugar durante los días anteriores y el ultimátum dado por las fuerzas marroquíes el 23 de junio, sugieren un cierto grado de preparación, e incluso de premeditación, de la represión ejercida contra las personas migrantes por parte de las fuerzas de seguridad marroquíes antes del 24 de junio", concluye.

Ese mismo día, las fuerzas marroquíes dejaron llegar a los inmigrantes hasta la zona fronteriza. Una vez allí, las acorralaron y las dirigieron hacia el Barrio Chino. Los propios supervivientes describen su llegada al patio del puesto fronterizo del Barrio Chino bajo control operativo marroquí como la entrada en una "trampa".

España no fue responsable

El pasado viernes el ministro de Interior del Gobierno español, Fernando Grande-Marlaska, recordó que la Fiscalía General del Estado de España llevó a cabo una "amplia y exhaustiva" investigación y concluyó que no hubo "ningún tipo de responsabilidad por parte de ninguna autoridad ni ningún funcionario español".



Por su parte, el organismo público marroquí Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH) realizó un informe sobre los hechos del 24 de junio de 2022 en el que concluyó que los muertos eran 23 y que fallecieron por "caída de la valla" y "asfixia mecánica".



La semana pasada, la ONG Border Forensics y el Centro por la Defensa de los Derechos Humanos Iridia publicaron un "contrainforme" que señala a los dos países vecinos como responsables de la tragedia de Melilla: a Marruecos por la "trampa" tendida a los migrantes, que desencadenó su intento de entrada, y a España por la respuesta policial en la valla "hiriendo a personas migrantes y tratándolas de forma inhumana y degradante".

Aministía Internacional y otras ONG siempre han defendido que la cifra de muertos supera los 100, algo que Marruecos niega. 

Flores en la valla de Melilla

Una decena de personas de diferentes asociaciones han colocado este lunes flores en la valla fronteriza entre España y Marruecos en Melilla, en el paso de Barrio Chino, al cumplirse el segundo aniversario de uno de los intentos de entrada de migrantes más trágicos en la frontera sur, en el que murieron 100 inmigrantes.

Este homenaje se ha producido poco después de las 8:15 horas, la hora en la que el 24 de junio de 2022 que ocurrió el salto a la valla, en el que murieron 23 migrantes, según las cifras oficiales de Marruecos, que las ONG elevan a 70 y alguna de ellas, como Amnistía Internacional, por encima del centenar.

Este homenaje se produce un día después de una concentración en silencio en el centro de Melilla en la que alrededor de medio centenar de personas, entre ellas una veintena de usuarios del Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), recordaron a las víctimas del 24-J con varias pancartas, una de ellas de gran tamaño, para reivindicar No más muertes en la Frontera Sur.