En uno de los movimientos más sonados del año en el ámbito corporativo, Starbucks anunciaba el pasado 13 de agosto el fichaje de Brian Niccol como nuevo consejero delegado. El californiano, que ha ido haciendo carrera en el sector de la alimentación desde hace más de 25 años, tendrá grandes condiciones laborales, como es de esperar para una persona de su nivel de responsabilidad. Sin embargo, el teletrabajo absoluto no será uno de los privilegios.
El también nuevo presidente de la compañía tendrá que volar semanalmente desde su domicilio en California hasta las oficinas centrales de la empresa en Seattle, a unos 1.600 kilómetros de distancia. Eso sí, lo hará en el avión de la compañía.
Tal y como está indicado en su contrato de trabajo, Niccol podrá "utilizar el avión de la compañía para viajes de negocios de acuerdo con la política de viajes de la compañía, viajes entre su ciudad de residencia y la sede de la compañía en Seattle (Washington) y viajes personales de acuerdo con las políticas de la compañía, hasta una cuantía máxima de 250.000 dólares al año".
La corporación indica que Niccol no tiene obligación de trasladar su domicilio hasta Seattle, sino que se le facilitará una "pequeña oficina remota" cerca de su vivienda en Newport Beach (California), así como un asistente en esa localización. Además, si decide mudarse de forma permanente a Seattle, la mudanza correrá a cargo de Starbucks.
Según indicó un portavoz de la firma a la cadena CNBC, Niccol estará obligado a cumplir con la política de presencialidad laboral, que le forzará a asistir a la sede central al menos tres días a la semana cuando no esté cumpliendo su labor como máximo responsable en algún otro viaje de trabajo.
Niccol accede a la compañía con un salario base de 1,6 millones de dólares anuales que será revisable anualmente, y un bonus por contratación de 10 millones de dólares. Junto con otro tipo de remuneraciones en acciones para los próximos años y bonuses ligados a objetivos, el nuevo jefe de Starbucks opta a ganar hasta 113 millones de dólares en los próximos tres años.
Gran recibimiento
Niccol, que hasta ahora ejercía de consejero delegado de Chipotle, asumirá sus nuevas funciones en Starbucks el próximo 9 de septiembre, relevando en el puesto a Laxman Narasimhan, que dejó el cargo de director ejecutivo hace diez días. De forma interina manejará la transición la directora financiera, Rachel Ruggeri.
Actualmente, Niccol ocupaba el cargo de presidente y director ejecutivo de Chipotle, donde ha liderado la transformación de la cadena de restauración, estableciendo nuevos estándares en la industria e impulsado un crecimiento significativo y la creación de valor.
"Estamos encantados de dar la bienvenida a Brian Niccol a Starbucks. Nuestra junta directiva cree que será un líder transformador para nuestra empresa, nuestra gente y todos los que atendemos en todo el mundo", indicó Mellody Hobson, presidenta de la junta directiva de Starbucks.
Por su parte, Brian Niccol se mostró "entusiasmado" por formar parte de Starbucks. "Hace mucho que admiro la marca icónica de Starbucks, su cultura única y su compromiso de mejorar las conexiones humanas en todo el mundo. Al embarcarme en este viaje, me siento motivado por el tremendo potencial para impulsar el crecimiento y mejorar aún más la experiencia para nuestros clientes y socios, al mismo tiempo que nos mantenemos fieles a nuestra misión y valores", señaló.
Tras hacerse publica esta decisión, la cotización de las acciones de Starbucks aquel día se dispararon un 24,5% al cierre en Wall Street, hasta marcar un precio de 95,90 dólares por acción, un registro que no visitaba desde el pasado mes de febrero.