El presidente de Argelia, Abdelmadjid Tebboune, indultó este jueves a 4.000 detenidos con motivo del 70º aniversario del estallido de la Revolución, que se celebra el 1 de noviembre. Los dos decretos presidenciales afectaron a condenados en casos de derecho común y de alteración del orden público. De esta manera, varios presos de conciencia han quedado en libertad, entre ellos los periodistas Omar Ferhat y Sofiane Ghirous de Algerie Scoop, e Ihsane El Kadi, director de Radio M y Maghreb Émergent.
Tras 22 meses en prisión, este jueves Ihsane El Kadi salió de la prisión de El Harrach (Argel) donde estuvo detenido desde el 29 de diciembre de 2022. El periodista de 65 años se encuentra bien y ha enviado agradecimientos a todos quienes se solidarizaron con él. Sus dos medios de comunicación fueron clave durante las protestas del movimiento Hirak, que consiguió la dimisión del presidente Abdelaziz Bouteflika en 2019.
Reporteros sin Fronteras (RSF) ha acogido “con satisfacción” el indulto, que ha solicitado en varias ocasiones. “Con inmenso alivio tomamos nota de la liberación de Ihsane El Kadi. Esta medida pone fin al calvario de más de 23 meses para este gran periodista y su familia”, anunció Khaled Drareni, representante de RSF en el Norte de África. La organización recuerda en un comunicado que “nunca debería haber sido encarcelado”. Asimismo, esperan que sea también “una señal para el levantamiento de las restricciones a la libertad de prensa”.
Ihsane El Kadi fue detenido la noche del 24 de diciembre de 2022 en su casa de Zemmouri, y puesto en prisión preventiva en la cárcel de El Harrach el 29 de diciembre por un juez de instrucción del Tribunal de Sidi M'hamed en Argel. Fue condenado a cinco años de prisión (dos en libertad provisional), aunque el Tribunal de Apelación aumentó su pena a siete años (dos en libertad condicional), por haber recibido “fondos y ventajas de fuentes extranjeras con el fin de realizar propaganda política” y “haber socavado la seguridad del Estado (...) y el orden público”. Se trata de los artículos 95 y 95 bis del Código Penal argelino.
Además, una polémica ley de información castiga a los medios argelinos que reciban cualquier ayuda material o financiación del extranjero con sanciones penales y multas que sobrepasan los 13.000 euros, incluso les pueden decomisar los bienes, como ha sucedido con Ihsane El Kadi. El tribunal también ordenó la disolución de la empresa Interface Médias que publica los dos digitales y la incautación de su material.
Sin embargo, “esta acusación no fue fundamentada durante el juicio. Se trataba en realidad de sumas de dinero enviadas por su hija, que vive y trabaja en Londres, y también es accionista de Interface Médias, la empresa de Ihsane El Kadi, editora de Radio M y Maghreb Émergent, estaba destinada a pagar los salarios de los empleados”, detalla Khaled Draneri.
"Encarcelado por sus opiniones"
Su familia siempre denunció que el periodista fue “encarcelado por sus opiniones”. “Sus amigos, sus colegas y todos aquellos que se preocupan por el advenimiento del Estado de derecho en Argelia no están menos conmocionados que nosotros”, escribió entonces su familia en una declaración pública.
RSF lideró una importante campaña internacional a favor de la liberación de este periodista, “respetado en Argelia y en el extranjero por su independencia y su rectitud”, defendió el también periodista Khaled Draneri. Concretamente, la organización se puso en contacto con el relator especial de las Naciones Unidas sobre la promoción y protección del derecho a la libertad de opinión y de expresión, así como con la Coalición por la Libertad de los Medios. También reunió a 16 jefes editoriales de 14 países, incluido el premio Nobel de la Paz Dmitri Muratov, para exigir su liberación. La petición internacional lanzada por RSF en defensa de Ihsane El Kadi, que siempre luchó por una prensa argelina libre e independiente, recogió más de 20.000 firmas, las primeras 13.000 fueron depositadas frente a la embajada de Argelia en París. Fue la segunda petición más firmada en la plataforma de RSF después de la de Julien Assange.
Igualmente, el jueves quedaron en libertad los periodistas del digital Argelia Scoop, Omar Ferhat y Sofiane Ghirous, en prisión preventiva desde junio de 2024 por un vídeo publicado en su medio de comunicación que mostraba a jóvenes saharauis quejándose de marginación.
En realidad, desde 2019, una veintena de periodistas han sido juzgados o perseguidos por las autoridades en Argelia, que ocupa el puesto 136 de 180 países en la clasificación mundial de la libertad de prensa.
Esta medida popular de liberar a los presos de conciencia se asemeja al indulto real de Mohamed VI en el mes de julio con motivo del 25º aniversario de su subida al trono. Entonces, el rey marroquí también concedió su perdón a tres periodistas encarcelados, Omar Radi, Soleiman Raissouni y Taofik Bouachrine, y liberó de sus penas y procesos a otros cinco colegas.
Precisamente, Marruecos fue el gran ausente en una fiesta tan simbólica en Argel, que conmemora el inicio de la guerra de Independencia en 1954, que duró ocho años, hasta que Argelia consiguió independizarse de Francia. De hecho, el resto de países del Magreb celebraron una reunión para hablar de “un nuevo proyecto magrebí”. Entre los invitados de honor se encontraban el presidente tunecino, Kais Saied; el homólogo mauritano, Mohamed Ould Ghazouani; el jefe del consejo presidencial de Libia, Mohamed Menfi; y el secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD), Brahim Ghali.
Argel celebró un grandioso desfile militar acompañado del himno nacional, 70 cañonazos y música militar. Es el segundo de este tipo desde que el presidente Abdelmadjid Tebboune llegó al poder en diciembre de 2019. El primero bajo su reinado se celebró el 5 de julio de 2022, con motivo del 60º aniversario de la independencia nacional, con un increíble despliegue armamentístico y la presencia de Mujahid Ismail Haniyeh, jefe del Movimiento de Resistencia Islámico Palestino Hamás, recientemente asesinado, y del presidente palestino Mahmoud Abbas.