La Unión Europea se une al rechazo generalizado de la comunidad internacional a la Asamblea Constituyente electa el domingo en Venezuela. En un comunicado, los estados miembros no reconocen este órgano y reclaman a Nicolás Maduro que rectifique y suspenda su puesta en marcha, prevista para este jueves.
La UE y sus Estados miembros "no pueden reconocer la Asamblea Constituyente por su preocupación en cuanto a su efectiva representatividad y legitimidad", señaló la alta representante de la Unión para la Política Exterior, Federica Mogherini,
Al contrario que Estados Unidos, la UE no ha adoptado sanciones económicas pero advirtió que "intensificarán" su respuesta si se siguen socavando los principios democráticos en ese país.