"Mataron a mi hermano, hijos de puta. Mataron a mi hermano porque los sacan a navegar con alambre”. La desesperación y las malas noticias hacen mella entre los familiares de los 44 tripulantes del ARA San Juan, el submarino argentino desaparecido hace ocho días en el Océano Atlántico.
El grito de rabia lo profirió un hombre a la salida de la Base Naval de Mar de Plata al poco de conocer las últimas noticias sobre el operativo de búsqueda, según informa el diario argentino Clarín.
Según el último informe de la Armada argentina el día de la desaparición se registró un "evento anómalo singular corto, violento y no nuclear consistente con una explosión" en el lugar donde se perdió la pista al submarino.
El ánimo entre los familiares que esperan desde hace días noticias sobre la situación de sus seres queridos se ha transformado en rabia y llanto, según relata el diario argentino. "Nos mintieron", dijeron desde otro coche que abandonaba la Base Naval. La noticia de la explosión también ha extendido el dolor entre los trabajadores de la instalación militar. Las labores de búsqueda continuarán en las próximas horas.
El sumarino tenía reservas de oxígeno pero estas se tenían que agotar este miércoles, por lo que las esperanzas de encontrar supervivientes se desvanecen incluso más. "Estoy esperando un cadáver", comentaba hace unas horas Helena Alfaro, hermana de uno de los tripulantes.
"Hay demasiado protocolo y demasiada burocracia", se lamentaba en una entrevista con la televisión argentina TN. Los medios del país latinoamericano han destacado el retraso de la Armada al alertar al presidente Mauricio Macri de que se había pedido contacto con el submarino la semana pasada. De hecho, el ministro de Defensa se enteró de lo sucedido por la prensa.