El expresidente brasileño, Lula da Silva, acepta su final político. Tras el veto judicial, Lula ha desistido de ser candidato del PT a la presidencia de Brasil en el último día en que legalmente se podía presentar un cabeza de lista.
Como era previsible, será su número dos Fernando Hadad el que encabece el cartel electoral para los comicios del próximo 7 de octubre. El expresidente brasileño encabezaba todas las encuestas de estas inciertas elecciones. Los sondeos también reflejaban que si Lula no era candidato, la opción favorita de los brasileños sería la ultraderecha de Bolsonaro.
Con el relevo de Lula a Hadad, que había sido alcalde de Sao Paolo, entra en juego el imprevisible trasvase de votos. ¿A dónde irán los votos que Lula tenía asegurados?
Lula está preso desde el pasado 7 de abril, condenado a doce años por corrupción, y de acuerdo a las normas en vigor en el país, una persona con una sentencia confirmada en segunda instancia, como es su caso, no puede postular a ningún cargo público.