Colombia vive una de sus épocas más violentas desde la firma hace casi cuatro años del acuerdo de paz con las FARC, por el resurgimiento de las masacres que en las dos últimas semanas dejaron más de 30 muertos y que el Gobierno llama de "asesinatos colectivos".
Tres de esas matanzas ocurrieron este fin de semana en convulsas zonas olvidadas del país y disputadas a muerte por los grupos armados que buscan controlar el negocio del narcotráfico y otras actividades ilegales.
"Los colombianos tenemos que hacer un gran esfuerzo porque parece que no nos doliera la muerte y los asesinatos de nuestros conciudadanos", cuestionó el defensor del pueblo, Carlos Negret.
El funcionario agregó en un video publicado por su despacho: "Lo que ha ocurrido en estas zonas de Colombia es el resultado de la falta de presencia estatal en los departamentos de Cauca, Valle del Cauca, Arauca y Nariño".
El defensor aseguró que lo que vive el país es "la razón de la guerra" por el "negocio ilícito del narcotráfico, especialmente, pero también por la minería ilegal".
Espiral de violencia
En la primera masacre reciente, cinco adolescentes de entre 14 y 15 años fueron asesinados el 11 de agosto en un barrio de la periferia de Cali, capital del Valle del Cauca.
Hace una semana ocho jóvenes de entre 19 y 25 años, algunos de ellos estudiantes universitarios, fueron masacrados en una casa rural del municipio de Samaniego en el departamento de Nariño.
En esa misma localidad, horas antes fue asesinada una mujer de 26 años, crimen que al igual que el de los ocho jóvenes, sigue sin ser esclarecido.
El pasado martes se conoció el asesinato días antes de tres indígenas de la comunidad awá en una aldea del municipio de Ricaurte, también en Nariño.
El viernes, las autoridades confirmaron otras dos masacres ocurridas en El Tambo, en el departamento del Cauca, con seis muertos, y en Arauca, capital del departamento del mismo nombre, con cinco víctimas.
En la más reciente, seis personas fueron asesinadas este sábado en la localidad de La Guayacana, que hace parte de Tumaco, en el departamento de Nariño, fronterizo con Ecuador.
Por eso, la Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para Derechos Humanos en Colombia dijo hoy que ha recibido "con honda preocupación informaciones sobre varias posibles masacres" al tiempo que condenó "toda violencia".
Duque promete contundencia
El presidente Iván Duque viajó este sábado a Cali, donde fueron acribillados los primeros cinco jóvenes, y allí prometió contundencia contra el crimen organizado y celeridad en las investigaciones de estos homicidios.
"Aquí estamos como Gobierno para rechazar la violencia y les hemos dicho que estaremos entregando resultados rápidamente para esclarecer estos hechos y que se haga justicia", dijo en el primer viaje que hace a uno de los sitios en los que han sido perpetradas las matanzas.
"Estos hechos son cometidos por la criminalidad organizada, como puede ser este caso en Llano Verde, pero también son producto de grupos criminales como las disidencias de las FARC, (la guerrilla de) el ELN, el Clan del Golfo, Los Caparros, Los Pelusos y otras bandas al servicio del narcotráfico y extracción ilegal de minerales", agregó.
Homicidios colectivos
El mandatario visitó posteriormente la localidad de Samaniego y provocó fuertes críticas al afirmar que las matanzas en distintas partes del país no son "masacres" sino "homicidios colectivos".
"Muchas personas han dicho: 'volvieron las masacres, volvieron las masacres', primero hablemos del nombre preciso: 'homicidios colectivos', y tristemente hay que aceptarlo como país, no es que volvieron, es que no se han ido tristemente estos hechos de 'homicidios colectivos'", dijo en Pasto, capital del departamento de Nariño.
En Samaniego el presidente fue recibido con abucheos y gritos de "justicia". En videos publicados en redes sociales se ve a Duque caminando por las calles en medio de los reclamos de los habitantes del lugar que exigían paz.
Duque, cuyo Gobierno culpa en parte de la situación actual al de su antecesor, Juan Manuel Santos, insistió hoy en que las masacres siempre han ocurrido en el país.
"Desde 1998 hasta hoy, año 2020, en Colombia se han presentado 1.361 escenas de 'asesinatos colectivos', 'homicidios colectivos'", dijo el presidente subrayando la cifra de 1.361 en 22 años.
Medidas del Gobierno
Como respuesta a las recientes masacres, la Fiscalía General ha enviado a cada uno de los departamentos afectados equipos especializados en investigación.
A su vez, el Ministerio de Defensa anunció este sábado la creación de la "Unidad Especial de Identificación, Ubicación y Judicialización de perpetradores de homicidios colectivos", un equipo élite para tratar de esclarecer esos crímenes.
El Ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, insistió en que "detrás de las masacres de los últimos días están los mismos masacradores de siempre y por las mismas razones".
Se refirió así a la antigua guerrilla de las FARC, al ELN y a grupos de narcotráfico y delincuencia, de los que dijo "creyeron que podrían tomarse el país bajo la total impunidad".