La investidura de Petro en Colombia culmina el giro a la izquierda en la región: "Debemos estar unidos"

Gustavo Petro (nacido en Ciénaga de Oro, Córdoba, en 1960) ya es el nuevo presidente de Colombia. Es el primer jefe de Estado de izquierdas que llega al poder en la república colombiana, algo que ha generado altas expectativas pero también muchas reservas en diversos sectores de su país y fuera de sus fronteras.

Las principales críticas contra este economista de 62 años tienen que ver con su pasado, cuando formaba parte del grupo armado M-19, que está detrás de algunos de los episodios más violentos de la historia reciente de Colombia. Sin embargo, Petro siempre ha defendido que nunca fue un hombre de acción. "No me gustan las armas ni los uniformes, y en la guerrilla me aburría la jerarquía militar", confesó en su momento al diario The New York Times.

Este domingo, durante su toma de posesión, Petro no hizo ninguna alusión explícita a su etapa como guerrillero y en su lugar hizo un llamamiento a la unión para que la región (América Latina) sea fuerte en un "mundo complejo".

[Petro, el ex guerrillero que busca liderar el país más conservador de Latinoamérica]

"Hoy necesitamos estar más juntos y unidos que nunca. Como dijo alguna vez Simón Bolívar: 'La unión debe salvarnos, como nos destruirá la división si llega a introducirse entre nosotros'. Que se acabe la división de América Latina. Pero la unidad latinoamericana no puede ser una retórica, un mero discurso", aseveró.

El mandatario colombiano, que sucede en el cargo a Iván Duque, señaló que para Latinoamérica es "hora de dejar atrás los bloques, los grupos y las diferencias ideológicas para trabajar juntos".

Gustavo Petro durante su investidura como presidente de Colombia. Reuters

"Entendamos de una vez y para siempre que es mucho más lo que nos une que lo que nos separa. Y que juntos somos más fuertes. Hagamos realidad esa unidad con la que soñaron nuestros héroes, como Bolívar, San Martín, Artigas, Sucre y O’Higgins. No es una utopía ni es romanticismo", señaló, tal y como recoge Efe.

Por ello, consideró que la región debe juntar su "poder del conocimiento, de la economía y de la vida", pues si los países actúan juntos "la voz de América Latina se escuchará en el concierto de los pueblos del mundo".

Giro a la izquierda

La llegada de Petro a la Casa de Nariño le lleva a formar parte del grupo de gobiernos de izquierdas que recientemente han sido elegidos en Hispanoamérica y que marcan una tendencia casi contagiosa. Es el caso de Chile, con Gabriel Boric al frente desde diciembre de 2021. O el de Perú, donde José Pedro Castillo Terrones, un político integrante de las rondas campesinas y dirigente sindical que ganó con el partido Perú Libre y derrotó a su rival, Keiko Fujimori, con una diferencia de 44.200 votos.

Pero hay otros muchos ejemplos: el de Xiomara Castro como líder de Honduras, el de Laurentino Cortizo Cohen en Panamá o el de Luis Arce en Bolivia. En la lista no pueden faltar tampoco el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), ni el de Argentina, Alberto Fernández.

[Mujer, Negra, Limpiadora y Mandará en Colombia: la "Figura Inédita" de Francia Márquez]

La tendencia puede consumarse en toda América Latina si finalmente Luiz Inácio Lula da Silva se impone a Jair Bolsonaro en las elecciones que Brasil celebrará en octubre. Y a esta larga lista hay que sumar los casos de Venezuela, Nicaragua y Cuba; países considerados como regímenes autoritarios de izquierda por la mayor parte de Occidente.

El mandatario colombiano, que es el primer presidente izquierdista que llega al poder en el país, señaló que se debe trabajar en proyectos conjuntos latinoamericanos como la conexión de todas las redes de energía eléctrica, que las fuentes de energías sean limpias o el impulso de empresas petroleras públicas.

Gustavo Petro jura el cargo como presidente de Colombia. Reuters

"Acabamos de vivir quizás lo peor de la pandemia de Covid, y América Latina no fue capaz de juntarse, de coordinarse, para comprar las vacunas más baratas, prácticamente fue usada sin capacidad de negociación, dispersa en sus gobiernos", criticó.

Por ello se preguntó: "¿Vamos a tener una Latinoamérica sin capacidad de investigación científica?, ¿Una Latinoamérica sin capacidad de coordinar sus servicios de salud, sin capacidad de coordinar las compras de medicamentos de manera unificada?".

"Agradezco la presencia de presidentes, presidentas y otros representantes de los pueblos hermanos de Latinoamérica y del mundo. En tiempos en los que vemos a naciones hermanas bombardeándose, aquí, en el corazón de Colombia, en el corazón de Latinoamérica, hay una decena de presidentes y presidentas de la región, con diversidad ideológica y diferentes trayectorias, pero todos unidos y unidas compartiendo esta verdadera fiesta de la democracia", valoró.

Polémica en la investidura

El acto de la toma de posesión de Petro ha estado envuelto en cierta polémica porque el nuevo presidente de Colombia, tras su juramento, ordenó traer la espada de Simón Bolívar (el histórico Libertador venezolano que lideró la independencia de Colombia), en lo que se convirtió en la primera orden de su mandato.

[América Latina saldrá del socialismo]

El ya expresidente Iván Duque se negó a conceder el permiso de sacar la insignia de la Casa de Nariño, también en su última decisión de Gobierno.

Una media hora después, el presidente del Senado, Roy Barreras, ordenó un inusual receso de diez minutos en la ceremonia de investidura para dar tiempo a que la Casa Militar de la Presidencia llevase la espada a la tarima, antes del discurso de Petro.

La espada de Simón Bolívar ha estado presente durante la investidura de Gustavo Petro. Reuters

"Esta espada tiene tanta historia que hoy sumará una más, de por qué se demoró en llegar a esta plaza", dijo el nuevo presidente al recibir ese símbolo histórico. Y posteriormente se refirió a ella "no como un símbolo de guerra, sino, como dijo su propietario, que sólo se debería envainar cuando haya justicia en Colombia".

Conviene recordar que la espada de Simón Bolívar fue robada por la guerrilla Movimiento 19 de Abril (M-19), a la que perteneció Petro, que la sustrajo el 17 de enero de 1974 de la Quinta de Bolívar, una casa museo en el centro de Bogotá donde estaba en exhibición. Así que de algún modo, el pasado de Petro estuvo presente de forma implícita durante su toma de posesión.

[Colombia legaliza el aborto hasta las 24 semanas de embarazo tras una votación histórica]

Para Petro, que en su juventud militó en el M-19, la espada tiene un gran valor simbólico, y por eso quería que estuviera en su acto de investidura, junto con la escultura de la paloma de la paz, creada por el maestro Fernando Botero para la firma del acuerdo de paz con las FARC, en 2016.

Presencia de Felipe VI

El rey de España, Felipe VI, se reunió este domingo con el presidente saliente de Colombia, Iván Duque, en una de las últimas actividades del mandatario como jefe de Estado del país andino, antes de hacerlo con su sucesor, el presidente electo, Gustavo Petro.

El rey Felipe VI durante la toma de posesión de Gustavo Petro como presidente de Colombia. Reuters

"Fructífera reunión con SM Rey Felipe VI, con quien trabajamos estos 4 años en el fortalecimiento de nuestras relaciones. Destacamos su reconocimiento al proceso democrático y ordenado de nuestro país, así como su respaldo en vacunación, comercio y migración", dijo Duque en un mensaje publicado su cuenta de Twitter.

En su visita a Bogotá para asistir a la ceremonia de investidura de Colombia de Gustavo Petro, el Rey también se reunió con el presidente entrante.

Al respecto, el ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, señaló a los periodistas que las relaciones de su España con Colombia durante el Gobierno de Petro "van a ser igual de intensas que con el presidente Duque". "La amistad, los lazos culturales, humanos e históricos que hay con Colombia van más allá de cualquier Gobierno", añadió.

En esa línea, detalló que en la reunión con Petro se abordaron temas como "la defensa del medioambiente, la lucha contra el cambio climático, la promoción de la biodiversidad, por un lado, y, por otro lado, esa agenda de paz".

"En ambos casos, Colombia y el presidente Petro pueden contar con España. Yo he tenido un breve encuentro con el canciller (designado) Álvaro Leyva, al que ya tuve ocasión de ver de manera informal en Madrid, y hemos intercambiado (información) sobre esa agenda de paz y el acompañamiento que España está dispuesta a dar, si así lo solicita el Gobierno de Colombia", dijo.

En su visita a Bogotá, el rey de España también tuvo reuniones con el mandatario ecuatoriano, Guillermo Lasso, y con la colectividad española.