El impactante vídeo desde el interior de un avión en EEUU: así falló su tren de aterrizaje delantero

Los aeropuertos de Estados Unidos se están convirtiendo en un lugar de riesgo. Los pasajeros del vuelo 1092 de la aerolínea Delta no olvidarán jamás este día. Su viaje, que tenía que iniciarse en Charlotte y tomar tierra en Douglas, dentro del estado de Carolina del Norte en EEUU, se ha convertido en una auténtica pesadilla. Una situación dramática que ha quedado filmada en vídeo y es que algunos se atrevieron a grabar el momento a pesar de la situación de pánico generalizado. 

Personas con rostro de miedo y pavor, agarrados a sus asientos y confiando en la pericia del piloto para evitar una desgracia. Así es como han vivido los pasajeros de este avión de Delta un aterrizaje que seguramente no olvidarán jamás. Un fallo en la aeronave provocó que la situación se pusiera realmente tensa y dramática. 

Varios de los pasajeros pudieron explicar tras el vuelo cómo habían vivido una situación tan complicada y en la que muchos experimentaron un miedo que no habían sentido nunca. Por suerte, el aterrizaje, aunque con riesgo, se pudo completar con éxito y sin daños personales ni materiales. A bordo viajan más de 100 personas, por lo que podría haberse producido una enorme catástrofe. 

¿Qué pasó en el dramático aterrizaje del avión de Delta de EEUU?

"El piloto nos dijo: 'vamos a aterrizar, vamos a escuchar un gran ruido sordo y vamos a escuchar mucho chirrido'". Estas fueron las palabras de Chris Skotarczak a Associated Press nada más bajarse del avión de Delta que realizaba el vuelo 1092 entre Charlotte y Douglas. Chris era uno de los 96 pasajeros que iban a bordo de la nave y que pasaron el que seguramente fue uno de los peores momentos de su vida. 

En dicho avión se encontraban, además de los 96 pasajeros, 5 miembros de la tripulación, por lo que en total fueron más de 100 vidas las que se pusieron en juego en un aterrizaje de lo más dramático y que sirvió para poner al límite las capacidades del piloto al mando de la situación.

El motivo por el que hubo que hacer este aterrizaje tan complicado fue porque el avión registró un problema. Concretamente, se había estropeado el tren de aterrizaje delantero del Boeing 717 de la compañía Delta. Cuando el piloto se dio cuenta, tuvo que intentar abordar el problema en cuestión de segundos para evitar una desgracia. 

A pesar del drama que se vivió dentro del avión, lo cierto es que fue más importante el susto que las consecuencias de la avería. El piloto consiguió tomar tierra con cierta normalidad y sin que los pasajeros sufrieran daño alguno. No hubo que lamentar heridos y solo alguna situación de estrés considerable dentro de la aeronave. 

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"Fue casi más suave que un aterrizaje normal", decían algunos de los pasajeros que bajaron del Boeing 717 aliviados y agradecidos a la labor de los profesionales que consiguieron solventar una situación un tanto crítica. Posteriormente pudieron ver cómo las ruedas del avión sobre las que tiene que descansar el aparato una vez toma tierra se situaban bajo las alas. A su vez, la nariz del mismo estaba sobre la pista al no haberse activado de manera correcta el tren de aterrizaje delantero. 

Así se grabó el dramático momento

Lo más impactante de la situación no fue el estado en el que quedó el avión una vez consiguió detener su marcha. Sino que lo más duro fue ver cómo se experimentó desde dentro la dramática situación. Los vídeos que varios pasajeros grabaron desde el interior del avión muestran el estado de nervios absoluto de algunas personas que llegaron a temer por sus vidas y por ser víctimas de una gran desgracia.

@washingtonpress

BREAKING: Boeing 717, Delta Flight 1092, makes an emergency landing at Charlotte Douglas International Airport in North Carolina with damaged landing gear. (DL1092) Video by passenger on board Gary Gibbs

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Mientras el avión intentaba tomar tierra, algunos pasajeros se agarraban la cabeza. Otros, por su parte, se cogían a su asiento o al respaldo del asiento que tenían delante. Una situación un tanto caótica que al final tuvo un final feliz. Tanto las autoridades como la aerolínea han confirmado que no hubo que lamentar daños ni heridos. 

Eso sí, tuvieron que evacuar a todas las personas a bordo del avión mediante un tobogán inflable que se extendía desde una de las puertas del Boeing 717. Delta ha ofrecido un comunicado para intentar explicar lo sucedido: "Pedimos disculpas a nuestros clientes por lo que experimentaron. Agradecemos que hayan dejado atrás su equipaje y artículos personales para permitir una evacuación rápida y segura y hemos estado trabajando para reunir a los clientes con esos artículos".