Venezuela entra en periodo electoral con pocas certezas sobre la candidatura de la oposición. A cuatro meses de las presidenciales del 28 de julio, el presidente Nicolás Maduro ha desoído las pautas de los acuerdos que firmó en Barbados el pasado octubre con EEUU, y ha inhabilitado a 16 partidos de la oposición. Entre ellos, el Vente de María Corina Machado, la gran apuesta del antichavismo para estas elecciones.
En la isla caribeña, el Gobierno, la oposición y una delegación estadounidense suscribieron un acuerdo de garantías políticas y electorales. A cambio de celebrar unas "elecciones competitivas", el Gobierno de Joe Biden ofrecía a Maduro aliviar las sanciones. Pero ni con esas: Venezuela sigue resignándose a que aspirantes a la presidencia como Machado concurran este verano, y Caracas tiene ya menos de un mes para que Washington ponga fin al alivio de las sanciones.
Este miércoles queda un día para que abran las postulaciones de los candidatos. A partir de este jueves, una treintena de partidos tendrá cinco días de plazo para inscribirse a los comicios. Pero Vente y las otras 15 agrupaciones inhabilitadas tienen pocas esperanzas de que la situación se revierta para ellos. En un vídeo publicado el lunes en sus redes personales, Machado se mostró desafiante contra el régimen: "Mano ganada no se tranca", dijo. Sin embargo, el tono de una entrevista publicada el martes por la BBC delata indignación.
Machado contó al medio británico que el oficialismo "quiere competir con candidatos falsamente opositores escogidos por la cúpula de Miraflores". Y prosiguió: "Es obvio que Maduro teme a la posibilidad de competir contra mí porque sabe que tendría una derrota aplastante. Está tratando de bloquearme porque es la primera vez en 25 años que [llegamos] bajo un régimen chavista en el que nos enfrentamos a una elección presidencial con más del 80% por ciento de apoyo", dice en alusión a encuestas del año pasado.
Pero las cifras de sondeos y la hipotética "derrota aplastante" quedarán probablemente en agua de borrajas si Vente no logra postularse para las elecciones. Y Machado lo sabe. En su vídeo de seis minutos, presenta alternativas: "Si no nos dejan participar iremos a los organismos internacionales", dice.
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Para muchos, la solución más viable es que la líder de la oposición encuentre relevo en un candidato admitido por Maduro que la sustituya en los comicios. Ante la pregunta de la BBC de si permitiría que alguien se presentara "en su nombre", Machado respondió: "No voy a cerrar ninguna posibilidad en este momento".
En octubre, Machado arrasó en las primarias de la oposición con el 92% de los votos. El Gobierno tildó aquellos comicios de "fraude" y "show", y Maduro mandó a las autoridades a investigarlos. Días después, la sala electoral del Tribunal Supremo de Justicia ordenó suspender los resultados de las primarias luego de un recurso interpuesto por el diputado oficialista José Brito, quien denunció irregularidades y las calificó de "gran estafa", sin ofrecer pruebas.
Dificultades para votar
Uno de los pilares de la militancia de Vente es su juventud. Bajo el nombre Jóvenes con Venezuela, el comando juvenil del partido de Machado ha denunciado irregularidades por parte del Consejo Nacional Electoral en la organización de los comicios. De las 1.500 máquinas previstas para la inscripción y actualización de los electores, el Estado solo ha instalado unos 279 equipos. Esto, según Clarín, que dejará por fuera a la mayoría de casi cuatro millones de nuevos electores.
La tarde del martes, las redes sociales de las juventudes de Vente se llenaron de llamados al nuevo votante a registrarse. "¡Frente al miedo de ellos, nos inscribimos!" o "#ChamoInscríbeteYA" son algunos de los mensajes que han circulado en X, y que la misma Machado ha republicado. En varios estados ha habido retrasos en las inscripciones, en parte por cortes eléctricos que interrumpieron el funcionamiento de las máquinas.
También tendrá dificultades para votar la diáspora venezolana. El jefe del Parlamento, Jorge Rodríguez, atribuye el fracaso del voto desde el extranjero —asegurado por la Constitución— a la hostilidad de la mayoría de naciones receptoras de emigrantes venezolanos. "Quien lo niega [su derecho al voto] son los que cercaron a Venezuela, la bloquearon. Asaltaron nuestras sedes diplomáticas, asaltaron a nuestros diplomáticos en Brasil, en Perú, en Ecuador, en Argentina, en los gobiernos de los seres que estuvieron allí en el pasado y en Estados Unidos de América", dijo Rodríguez a principios de marzo.
El lunes, Maduro acusó este lunes al opositor Leopoldo López y al expresidente colombiano Álvaro Uribe de conspirar contra las elecciones, y pidió al Ejército estar alerta, según Efe. Durante su programa semanal de televisión, el mandatario se refirió a la reunión que sostuvieron recientemente López y Uribe, a quienes calificó como "terroristas" y "criminales".
"Tengo información de planes que preparan ellos para atacar los estados vecinos del Zulia [fronterizo con Colombia] con terroristas, con paramilitares, atacar los servicios públicos [...] cuando esos dos terroristas perversos se reúnen es para conspirar", dijo. "No pueden venir estos terroristas a tratar de sabotear a Venezuela, para tratar de perturbar nuestra recuperación económica y perturbar la fiesta electoral de la democracia que vamos a tener el 28 de julio", subrayó.