La propuesta de los republicanos para revisar la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible, conocida como el 'Obamacare', dejaría sin seguro de salud a 24 millones de estadounidenses en 2026, 14 de los cuales se quedarían sin cobertura ya en 2018. Al mismo tiempo el déficit federal se reduciría en 337 mil millones de dólares, en los próximos diez años.
Estas son las conclusiones de los analistas presupuestarios del Congreso. El informe de la Oficina de Presupuestos del Congreso subraya un dramático descenso en el número de asegurados si se aprueba el plan propuesto por los republicanos, contradiciendo el presidente, Donald Trump, que aseguró que el plan "garantizaría un seguro para todo el mundo" y puede suponer una amenaza al apoyo de los republicanos moderados.
Los autores del plan, liderados por el portavoz de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, han argumentado que el número total de personas aseguradas es la manera errónea de medir el impacto del nuevo plan.
El informe marca el inicio de una nueva fase en el debate sobre el proyecto de ley de atención médica y supone un golpe para el liderazgo conservador, que pretende derogar la ley actual impulsada por Obama y reemplazarla por este nuevo plan, pero no ha encontrado consenso en su bancada, especialmente entre los ultraconservadores y el sector más moderado. Los republicanos más conservadores han pedido varios cambios en la propuesta, para que cuente con su apoyo.
La Casa Blanca ha pasado la última semana intentando conseguir que este ala republicano avale el plan y desacreditar la Oficina de Presupuestos del Congreso antes de que el organismo pudiera desvelar números que pusieran en tela de juicio la propuesta.
"Si estáis buscando precisión y exactitud en la Oficina de Presupuestos del Congreso, estáis buscando en el lugar equivocado", ha dicho el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer en la semana pasada.