Una bomba GBU-43 lanzada este jueves por Estados Unidos sobre Nangarhar, en Afganistán, ha matado a al menos 36 miembros del grupo terrorista Estado Islámico. El Pentágono ha difundido este viernes el vídeo de la explosión que causó la 'madre de todas las bombas'.
El bombardeo destruyó un complejo de túneles construido por los muyahidines durante la invasión soviética y mejorado por el grupo afiliado al Estado Islámico en el país (ISIS-K) en el país que había aguantado otros bombardeos.
La principal base del EI en el país estaba ubicada en una zona montañosa en la parte más elevada del Valle Momand, en el distrito Achin, donde el grupo se refugiaba en un complejo sistema de túneles y cuevas, explicaron hoy a Efe autoridades de Nangarhar.
Todas las partes del complejo, de unos 300 metros de largo bajo el terreno rocoso y conectado con las laderas de las montañas del valle, quedaron completamente destruidos en el bombardeo, informó hoy el Centro Gubernamental de Medios e Información.
Zabihullah Zmarai, vicejefe del Consejo Provincial de Nangarhar, indicó a Efe que en esta zona los muyahidines construyeron búnkers y túneles en cuevas tras la invasión soviética de Afganistán en 1979.