El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aseguró a los miembros de la Asociación Nacional del Rifle (NRA), el mayor grupo de presión ("lobby") a favor de la posesión de armas del país, que tienen un "amigo" en la Casa Blanca y prometió no actuar nunca contra el derecho a portar armas.
"El asalto de ocho años contra sus derechos protegidos por la Segunda Enmienda (de la Constitución de EEUU) ha llegado a un final apabullante. Tienen un amigo en la Casa Blanca", aseguró Trump en un discurso ante la convención anual de la NRA, en Atlanta (Georgia).
"Les prometo esto: como presidente, nunca interferiré en el derecho del pueblo de tener y portar armas. La libertad no es un regalo del Gobierno, es un regalo de Dios", añadió.
Trump es el primer presidente en intervenir ante la reunión anual de la NRA desde que lo hiciera Ronald Reagan en 1983, un hecho que destacó con orgullo al tiempo que aplaudió el apoyo público que ese poderoso grupo de presión le concedió durante la campaña electoral de 2016. "Ustedes me apoyaron y yo voy a apoyarles a ustedes ahora", subrayó el mandatario estadounidense, que mañana sábado cumplirá cien días en el poder.
Mantenerse "vigilantes"
Trump instó a los asistentes a mantenerse "vigilantes" ante quienes quieren atacar el derecho a portar armas, contemplado en la Segunda Enmienda de la Constitución estadounidense. "Cuando prohíbes las armas, (el resultado es que) solo los criminales estarán armados", defendió Trump, y aseguró que "una propiedad de armas responsable salva vidas".
Además, argumentó que su Gobierno ha "actuado rápidamente para restaurar algo que a los propietarios de armas les importa mucho: la aplicación de la ley", mediante un apoyo "claro" a los policías y agentes del orden.
Destacó, en particular, la política de tolerancia cero declarada por su Gobierno contra la banda criminal Mara Salvatrucha (MS-13), una banda creada en las calles de Los Ángeles (California, EE.UU.) y que ha ganado fuerza en Centroamérica, especialmente en El Salvador. "Saben lo que es la MS-13, ¿no? Las cosas ya no son agradables para ellos. Los vamos a sacar de aquí, ¿verdad? Fuera de aquí", dijo Trump.
Contraste con Obama
La posición de Trump sobre el control de armas contrasta fuertemente con la defendida por el expresidente Barack Obama, quien aseguró en varias ocasiones que una de sus mayores frustraciones era no haber podido hacer nada para evitar las muertes de inocentes en los tiroteos que se producen regularmente en EEUU.
Obama impulsó en 2013 medidas para controlar las armas, pero el Congreso no aprobó ni siquiera la que generaba más consenso en el país, la verificación de antecedentes de los compradores, debido en parte a la gran influencia política de la NRA.
Trump bromeó hoy con que es improbable que en las próximas elecciones presidenciales, en 2020, haya muchos aspirantes demócratas que acudan a hablar en la conferencia de la NRA, especialmente si se presenta "Pocahontas", el mote que usa para referirse a la senadora progresista Elizabeth Warren