En plena escalada de tensión con Corea del Norte, el presidente Trump planea de nuevo mover las fichas de su Administración. En esta ocasión, el damnificado que abandonaría la convulsa Casa Blanca del magnate republicano sería Rex Tillerson.
El secretario de Estado, máximo responsable de la diplomacia de EEUU, está en la casilla de salida la misma semana en la que la embajadora en la ONU ha pedido a todo el planeta aislar por completo al régimen de Kim Jong-un y poco después de que Trump cometiera un nuevo traspiés diplomático con Theresa May al retuitear a la ultraderecha británica.
El plan sobre la mesa del Despacho Oval es sustituir a Tillerson por el actual director de la CIA, Mike Pompeo, según ha adelantado en exclusiva The New York Times. Su lugar al mando de la poderosa agencia de inteligencia lo ocuparía Tom Cotton, un senador republicano que guarda una muy estrecha relación con el presidente Trump.
El futuro de Rex Tillerson lleva meses en el aire y los rumores sobre su posible salida del Gabinete no han cesado a causa de sus diferencias con Trump. El pasado octubre, el secretario de Estado se vio obligado a negar que estuviese sopesando su dimisión tras filtrarse detalles de sus tensas discrepancias con Trump, al que llegó a llamar "idiota" en medio de una reunión privada, según indicó NBC.
Trump ha evitado responder este jueves a las especulaciones zanjando que Rex Tillerson "sigue aquí". Los medios estadounidenses han matizado que el plan para sustituir al responsable de Exteriores, diseñado por John F. Kelly, aún no ha obtenido la aprobación final del presidente.
A través de un portavoz del Departamento de Estado, el propio jefe de Gabinete ha negado las especulaciones sobre el cese de Tillerson al tiempo que ha subrayado que el secretario de Estado "sirve a voluntad del presidente".
La previsible salida de Tillerson, que fue el máximo responsable de la petrolera Exxon antes de ser fichado por Trump, se viene gestando desde hace tiempo. Los choques entre ambos han sido continuos: desde la beligerante posición con Corea del Norte al acuerdo nuclear con Irán.
Si se confirma la renuncia o el cese, Tillerson se uniría a la larga lista de 'cadáveres' de la Casa Blanca de Trump. Más de 10 altos cargos han salido de la administración en este primer año de presidencia. Al margen de la sonada salida del director del FBI, James Comey, ni el secretario de prensa ni el director de comunicación ni el jefe de Gabinete son los mismos que hace unos meses.