El juez conservador nominado por Trump para el Tribunal Supremo, Brett Kavanaugh, acusado por dos mujeres de acoso sexual, se ha defendido de las acusaciones diciendo que en el momento de los hechos "era virgen". "No tuve nada ni cercano a una relación sexual ni durante el instituto ni hasta pasados muchos años", ha dicho el candidato en declaraciones a Fox News.
La entrevista, en la que también estaba la mujer de Kavanaugh, Ashley, surge un día después de que una segunda mujer le acusara de acoso y tres días después de que él y la mujer que le acusó en un primer momento fueran llamados a testificar ante el Senado.
Según la segunda acusación, de Débora Ramírez, de 53 años, Kavanaugh se quitó la ropa, borracho, durante una fiesta en una residencia de estudiantes, le plantó el pene en la cara y le hizo tocarlo sin su consentimiento mientras ella trataba de quitárselo de encima.
Christine Blasey Ford, la primera mujer que acusó a Kavanaugh de abuso sexual, dijo que el candidato al Supremo la había agredido sexualmente en una fiesta mientras cursaban la escuela secundaria en 1982.
Tras las declaraciones de Kavanaugh y Ford en el Senado, el órgano debe decidir si recomienda la candidatura del magistrado al resto de la cámara, que debe confirmarle.