El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado este martes que ha aprobado la desclasificación de documentos relacionados con la investigación federal sobre la interferencia de las elecciones por parte de Rusia y el uso de la exsecretaria de Estado Hillary Clinton de una cuenta de correo privada para enviar correos electrónicos del Gobierno.
Según ha escrito en Twitter, el presidente ha ordenado "la desclasificación total de todos y cada uno de los documentos relativos al mayor crimen político de la historia americana, el engaño de Rusia".
"De la misma manera, el escándalo del correo electrónico de Hillary Clinton. ¡No hay redacciones!", ha añadido en el mensaje.
La semana pasada, el exdirector de la Policía Federal de Estados Unidos (FBI) James Comey declaró ante un comité en el Senado que la investigación sobre si personas cercanas a Trump conspiraron con Rusia para interferir en las elecciones de 2016 se llevó a cabo "siguiendo las reglas", pero que había aspectos específicos de la investigación que "se quedaron cortos", según informa la cadena de televisión CNN.
Este comité, liderado por la senadora republicana Lindsey Graham, puso en duda la investigación federal y acusó a Comey y sus agentes de actuar con sesgo político. Ante las próximas elecciones presidenciales de Estados Unidos, en las que Trump se juega su reelección, la investigación por la supuesta interferencia rusa en las elecciones de 2016 ha vuelto al centro del debate después de que las agencias de inteligencia estadounidenses hayan manifestado que Rusia podría volver a interferir en los comicios de este año.
Uno de los objetivos de esta interferencia sería ayudar a la reelección del presidente, según han indicado varios medios estadounidenses. El fiscal especial Robert Mueller analizó la presunta injerencia de Rusia en las elecciones de 2016 y, aunque en su informe desligó a Trump de los supuestos intentos de Moscú por influir en las elecciones, apuntó hasta diez ocasiones en las que el presidente pudo obstruir las investigaciones. Desde que se publicaran los resultados de estas investigaciones
Trump ha intentado presentarse como una víctima en todo este proceso. Este mismo año, el Departamento de Justicia de Estados Unidos cerró la investigación abierta con Hillary Clinton por el uso de un servidor privado de correo electrónico durante su etapa como secretaria de Estado, al considerar que no había incurrido en ninguna irregularidad.
Las pesquisas fueron abiertas en 2018 por orden del entonces fiscal general, Jeff Sessions, y alentadas por Trump. El mismo Comey no recomendó presentar cargos contra Clinton, aunque advirtió que fue "extremadamente descuidada en la gestión desclasificada".