Kamala Harris se vacuna contra la Covid-19

La vicepresidenta electa de Estados Unidos, Kamala Harris, ha recibido la primera dosis de la vacuna contra la Covid-19 este martes. Harris lo ha hecho, tal y como Joe Biden y Mike Pence, en un acto público, transmitido por la televisión, en una iniciativa que busca aumentar la confianza de los estadounidenses en la inoculación.

El presidente electo demócrata Joe Biden, que asumirá el cargo el 20 de enero, ha dicho que hará de la lucha contra el coronavirus, que ha infectado a más de 19 millones de estadounidenses y ha matado a más de 334.000, su máxima prioridad. Recibió su primera dosis inyectada de la vacuna en vivo por televisión la semana pasada. Se requieren dos dosis para una protección completa.

El equipo de Biden ha puesto especial énfasis en la importancia de alentar la distribución de vacunas y la inoculación en grupos que no son de raza blanca, especialmente afectados por el coronavirus.

Harris recibió la vacuna Moderna Inc COVID-19 de una enfermera que llevaba una máscara y una visera en un centro médico en el sureste de Washington, donde habitan predominantemente personas de raza negra.

"Apenas lo sentí", dijo Harris, riendo, después de recibir la inyección en la parte superior del brazo izquierdo. "Quiero animar a todos a que se vacunen; es indoloro, es seguro, literalmente se trata de salvar vidas. Confío en los científicos".

Biden tiene programado dar una rueda de prensa de actualización sobre la pandemia en Wilmington, Delaware, en la tarde de este martes después de una reunión informativa con su equipo asesor para la Covid-19. El presidente electo deberá advertir de que se espera que las tasas de infección y la cantidad de muertes aumenten en las próximas semanas.

El presidente republicano saliente, Donald Trump, que tuvo Covid-19 en octubre, con frecuencia ha minimizado la gravedad de la pandemia y supervisó una respuesta que muchos expertos en salud dicen que fue desorganizada, arrogante e ignorando las recomendaciones científicas.

Biden heredará los desafíos logísticos de distribuir la vacuna a cientos de millones de estadounidenses, y persuadir a los ciudadanos para que la tomen.