Pieper Lewis tenía 15 años cuando apuñaló hasta en 30 ocasiones al hombre que la violó y la forzó a prostituirse, matándolo. Hoy, con 17, acaba de ser condenada a pagar 150.000 dólares a su familia y a 200 horas de servicio comunitario cada año durante tres. Queda en libertad, pero limitada.
Ocurrió en 2020 en Des Moines, en el estado de Iowa. La adolescente escapaba repetidamente de una vida de abusos de su madre adoptiva. Una noche, durmiendo en los pasillos de un edificio de apartamentos, un hombre de 37 años, Zachary Brooks, decidió acogerla. "No quería pero no tenía otro lugar adonde ir", declaró Lewis.
Brooks ofreció a Lewis a otros hombres para que la violaran a cambio de dinero. Él también la violó, todo a punta de cuchillo, varias veces durante varias semanas. Tras una de esas violaciones, relató ella misma, agarró un cuchillo de una mesita de noche y mató a su agresor.
"No era un peligro para ella"
Policía y fiscales han dado por bueno el testimonio de la joven, pero los segundos han argumentado para solicitar la condena que Brooks estaba dormido cuando esto ocurrió, por lo que -concluyen- "no representaba un peligro para ella" en ese momento.
El juez, David M. Porter, del tribunal de distrito del condado de Polk, ha dejado a Lewis en libertad condicional. Durante cinco años debe permanecer en una instalación residencial en Des Moines con un dispositivo de rastreo GPS "para evitar que vuelva al estilo de vida que llevaba".
En su testimonio, Lewis dijo que deseaba que "lo del 1 de junio de 2020 nunca hubiera ocurrido", pero que le parecía "absurdo" considerar a Brooks una "víctima". "Enfrento violación, abuso, odio, traición, manipulación, abandono, pérdida de un padre, soledad... Me pregunto qué más llevaré en ese saco de dolor".
Antes de anunciar su sentencia, el juez Porter preguntó a Lewis si había cometido errores en su vida. "Acabé con la vida de una persona -respondió-. Mi intención ese día no era quitarle la vida a alguien, pero sentí que estaba en peligro".
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"Soy una superviviente"
Lewis se había escapado de casa tres veces solo ese año. La primera vez fue a casa de la hermana de un compañero de clase. La segunda vez la acogió un vecino, pero la relación rápidamente se volvió violenta y se fue. En la tercera pasó lo mismo con otro vecino, Christopher Brown, que la inscribió en una web de citas para ganar dinero.
En sus dos años recluida -ha permanecido en un centro de detención de menores desde 2020- ha obtenido el título de secundaria y "tiene planes para su futuro", según uno de sus abogados. "A Pieper le está yendo muy bien dadas las circunstancias, es una joven increíble". Ella prefiere definirse como "una superviviente".
En 2019, el gobernador de Tennessee indultó a Cyntoia Brown, una mujer de 30 años que cumplió 15 años de cadena perpetua por matar a un hombre en similares circunstancias que las de Pieper Lewis.