Joe Biden y su mujer Jill, tras acabar el primer debate presidencial de 2024

Joe Biden y su mujer Jill, tras acabar el primer debate presidencial de 2024 Reuters

EEUU

Los demócratas, en alerta: temen perder a los grandes donantes tras el debate desastroso de Biden

Los benefactores están alarmados y especulan sobre cómo lograr que Biden renuncie a presentarse para que otro candidato se enfrente a Trump.

30 junio, 2024 03:02

El Partido Demócrata vive en las últimas horas una pesadilla de la que trata desesperadamente de despertar. La mala actuación de su candidato a las elecciones presidenciales, Joe Biden, contra Donald Trump en la noche del jueves abrió una 'caja de Pandora' que no será fácil de cerrar. El cuestionamiento de su salud mental por las incoherencias y balbuceos a abierto la veda a las críticas desde sus propias bases, desde los medios de comunicación afines y, también, desde los que hacen posible el enorme coste de una campaña electoral: los grandes donantes.

"El mayor problema son los donantes. Si el dinero se seca, todo el mundo entrará en pánico", confesaba a Politico un consejero de los demócratas en el Congreso.

Y eso es precisamente lo que puede pasar, según los benefactores consultados por varios medios de comunicación estadounidenses. "Tiene que haber repercusiones [por la estruendosa derrota en el debate], y cuanto antes alguien de la cúpula de la campaña acepte la responsabilidad por esta noche, antes se calmarán el resto de dudas sobre tener a Biden como nominado", recomendaba otro donante en declaraciones a Politico.

En conversaciones privadas y cadenas de mensajes, algunos donantes cuestionaron que Biden sea el candidato que pueda plantar cara a Trump en los comicios de noviembre y se plantean la posibilidad de pausar sus donaciones, según informa The Washington Post.

Por su parte, The New York Times ha tenido acceso a conversaciones entre habituales contribuyentes a las campañas demócratas, como la viuda de Steve Jobs, en las que se plantean cuáles pueden ser las vías para que el presidente dé un paso a un lado y qué personas podrían ser las adecuadas para enfrentarse a Trump por la Casa Blanca.

En consecuencia, los demócratas están tratando de contener la hemorragia. En las primeras horas tras el debate, aseguraron que todo marchaba bien y que el actual presidente había ganado la disputa. Poco después, entendieron que negar una realidad evidente no era la estrategia correcta y prefirieron poner el foco en las mentiras de Trump asumiendo que Biden ya no "debate como antes", como admitió él mismo en un mitin en la mañana del viernes.

Además, una integrante de la campaña presidencial demócrata aseguró en la red social X que habían recaudado más de 27 millones de dólares entre el final del debate y la mañana del sábado, poco más de 24 horas. Buena parte de estos fondos provienen de los actos programados para este fin de semana, cuyas entradas fueron vendidas antes del ya histórico debate.

Pese a ese dato, Biden ya venía sufriendo en las últimas semanas una caída en la recaudación de fondos con respecto a su rival. En el mes mayo, la campaña demócrata había recogido 85 millones de dólares, mientras que la de Trump recolectó 141 millones en el mes en el que se le condenó por 34 cargos penales. De hecho, la campaña del expresidente llegó a junio con 235 millones de dólares en el banco, mientras la del político de Pensilvania lo hizo con 212 millones.

Biden y la primera dama Jill Biden visitarán el exclusivo enclave playero de Nueva York conocido como los Hamptons para una recaudación de fondos de campaña organizada por el multimillonario Barry Rosentein. En el mismo día viajarán a Nueva Jersey para asistir a una recaudación de fondos organizada por el adinerado gobernador, Phil Murphy.

En el evento de Nueva York también van a estar Eric Mindich y su esposa Stacey, Sarah Jessica Parker y su marido Matthew Broderick, así como el actor Michael J. Fox.