El segundo intento de asesinato contra Donald Trump en 60 días ha agitado de nuevo la campaña presidencial de Estados Unidos y ha puesto todos los ojos sobre el Servicio Secreto del país.
El tiroteo en el club de golf de Trump en Florida de este domingo, que las autoridades investigan como intento de homicidio, ha provocado nuevos reproches entre republicanos y demócratas en un momento en el que las encuestas siguen augurando una carrera por la Casa Blanca ajustada, con un empate técnico entre el expresidente y la aspirante demócrata, Kamala Harris.
Tras el susto que sufrió en su campo de golf, este lunes Trump ha vuelto a entrar en campaña y ha acusado a la "retórica" de Biden y Harris de provocar los ataques que está sufriendo.
El primer intento de asesinato y las imágenes de Trump incorporándose con sangre en su rostro ya dieron un impulso al republicano en las encuestas. Ahora quiere volver a usar el suceso a su favor para coger un nuevo empujón en la carrera presidencial.
El acusado del intento de asesinato, identificado como Ryan Wesley Routh, "se ha creído la retórica de Biden y Harris y actuó en consecuencia", ha manifestado Trump este lunes en una entrevista en Fox News.
"Su retórica está provocando que me disparen cuando yo soy el que va a salvar al país, y ellos son los que están destruyendolo el país, tanto desde dentro como desde fuera", ha argumentado el republicano.
El expresidente señala frases de los demócratas en las que le definen como una "amenaza para la democracia" o de ser un aliado de dictadores como el norcoreano, Kim Jong-un.
El detenido por intentar matar a Trump es un hombre problemático que cuenta con decenas de antecedentes. Fue condenado hace más de 20 años por posesión de un arma considerada de "destrucción masivsa", una ametralladora automática.
Además, cuenta con un historial delictivo compuesto por más de 100 cargos. Tras comparecer por primera vez ante el tribunal federal de West Palm Beach (Florida), Ryan Routh, un hombre obsesionado con Ucrania, ha sido acusado de cargos relacionados con posesión de armas de fuego.
Por su parte, la jefa de campaña de Harris, Julie Chávez Rodríguez, ha contestado a Trump que es su "retórica divisiva y peligrosa" la que tiene "consecuencias reales". "Lo que dice no son solo palabras, es peligroso para nuestras comunidades y para nuestro país", ha declarado en una entrevista a la Agencia Efe.
Servicio Secreto cuestionado
Mientras Trump señala a sus rivales políticos, Biden ha señalado al Servicio Secreto pidiendo más apoyo para la institución. "Gracias a Dios el presidente (Trump) está bien. Una cosa que quiero dejar clara es que el servicio secreto necesita más ayuda. Creo que el Congreso debería dar una respuesta a sus necesidades. Necesitan más personal", ha declarado el presidente desde la Casa Blanca.
El director interino del Servicio Secreto de Estados Unidos, Ronald Rowe, estará en Florida "indefinidamente" hasta que concluya la investigación sobre el posible intento de asesinato al expresidente.
Rowe se reunirá este lunes con Trump y con miembros de la policía local que participaron ayer en la detención de Ryan Wesley, el hombre de 58 años acusado del intento de asesinato con un rifle AK-47.
En un mensaje publicado esta madrugada a través de Truth Social, Trump agradeció a los ciudadanos su preocupación y buenos deseos y también al Servicio Secreto de los Estados Unidos y al Sheriff Ric Bradshaw y su oficina.
"Y a todas las fuerzas del orden, por el increíble trabajo que hicieron hoy en Trump International para mantenerme a salvo, como el 45 presidente de los Estados Unidos y el candidato republicano en las próximas elecciones presidenciales. El trabajo realizado fue absolutamente excepcional", apuntó el republicano.