Agencias
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El equipo del presidente electo de EEUU Donald Trump está considerando emprender conversaciones directas con el líder norcoreano Kim Jong-Un, con la esperanza de que un nuevo impulso diplomático pueda reducir los riesgos de un conflicto armado, según informa Reuters citando a dos fuentes cercanas a este asunto.

Varios miembros del equipo del magnate ven posible un acercamiento directo de Trump, aprovechando una relación que ya existe, como la mejor vía de romper el hielo con Kim Jong-Un, años después de que ambos intercambiaran insultos y lo que Trump llamó cartas "hermosas" en un esfuerzo diplomático sin precedentes durante su primer mandato.

Pese a estar sobre la mesa esta posibilidad, no está claro si el mandatario norcoreano se mostrará receptivo con Trump. Pyongyang ignoró durante cuatro años los intentos de acercamiento del presidente estadounidense Joe Biden para iniciar conversaciones sin condiciones previas, y además Kim Jong-Un cuenta ahora con un mayor arsenal de misiles y una relación mucho más estrecha con Rusia.

"Ya hemos llegado tan lejos como pudimos en las negociaciones con Estados Unidos", subrayó el líder norcoreano la semana pasada en un discurso durante una exhibición militar en Pyongyang, según los medios estatales.

Durante su primer mandato, Trump mantuvo hasta tres reuniones con Kim Jong-Un, en Singapur, Hanoi y en la frontera con Corea, la primera vez que un presidente estadounidense en funciones pisaba el país.

La diplomacia no dio resultados concretos, aunque Trump dijo que sus conversaciones fueron una "relación amorosa". Estados Unidos pidió a Corea del Norte que abandonara sus armas nucleares, mientras que Kim Jong-Un exigió un alivio total de las sanciones y luego lanzó nuevas amenazas .

No está claro qué resultado arrojaría un nuevo esfuerzo diplomático. Un objetivo inicial de Trump sería restablecer un compromiso básico , pero no se han fijado objetivos políticos adicionales ni un calendario preciso, según las fuentes. Y este asunto puede quedar en segundo plano ante preocupaciones de política exterior más apremiantes en Oriente Próximo y Ucrania, según una persona informada sobre el pensamiento de la transición.

Los medios estatales norcoreanos aún no han mencionado públicamente la reelección de Trump, mientras el presidente norcoreano dijo este mes que Estados Unidos estaba aumentando la tensión y las provocaciones, incrementando los riesgos de una guerra nuclear.

El pasado viernes, Trump nombró a una de las personas que implementaron su estrategia inicial para Corea del Norte, el exfuncionario del Departamento de Estado Alex Wong, como su asesor adjunto de seguridad nacional. "Como representante especial adjunto para Corea del Norte, ayudó a negociar mi cumbre con Kim Jong Un", señaló Trump en un comunicado.

Trump heredará una situación cada vez más tensa con Kim Jong-Un cuando vuleva en enero a la Casa Blanca.

Hay preocupación en Washington sobre la expansión del programa de armas nucleares y misiles de Pyongyang, su retórica cada vez más hostil hacia Corea del Sur y su estrecha colaboración con el presidente ruso Vladimir Putin. Prueba de esto último es el envío de más de 10.000 soldados norcoreanos a la región rusa de Kursk para luchar contra Ucrania.