Tailandia celebra sus elecciones presidenciales este domingo 24 de marzo, cinco años después del golpe de Estado que alzó a los militares contra la democracia en el país, y que desde entonces mantiene al jefe de la junta militar, Prayut Chan-ocha, como líder del país.
La Comisión Electoral de Tailandia ha fijado la fecha con la aprobación de Chan-ocha, quien ha renunciado a presentarse a los comicios, pero que sin embargo ha sugerido que "aceptaría" seguir en el cargo si se lo ofrece un partido "leal".
El jefe de la Comisión Electoral, Ittiporn Boonpracong, ha sido el encargado de concretar las elecciones después de que el rey tailandés haya firmado la aprobación de las mismas, y después lo hiciera Chan-ocha.
Fue en mayo de 2014 cuando el presidente de la junta y general lideró el alzamiento militar contra la entonces primera ministra Yingluck Shinawatra, del partido Puea Thai. En estos cinco años, el general Prayuth y el resto de militares han aprobado una profunda reforma de la Constitución para reforzar el poder de las Fuerzas Armadas y quitárselo al Parlamento.
La reforma constitucional juega a favor de los militares, ya que establece que estos tienen la capacidad de aprobar o denegar el candidato propuesto por el Parlamento tras las elecciones, institución que tendrá que completarse con la elección 500 diputados, además de los 250 senadores.
El partido opositor, acosado por los militares
El partido Puea Thai ("Para los Tailandeses"), opositor a la junta militar, ha denunciado el acoso que está recibiendo por parte de quienes dieron el golpe de Estado en 2014. La junta militar habría ordenado registros y acoso a miembros y simpatizantes del partido en diferentes provincias del país.
En un comunicado lanzado por el partido, denuncian que el Consejo Nacional para la Paz y el Orden, nombre oficial de la junta militar, está realizando "registros sin órdenes judiciales" y actos intimidatorios, que tuvieron lugar aproximadamente una semana antes de las elecciones de este domingo.
"Hemos sabido por fuentes fiables que hay preparaciones para realizar las mismas actividades (registros e intimidación) en diversas áreas", dicen desde Puea Thai. El partido es el mayor opositor a los militares, pues fue el depuesto en el golpe militar y el que ha ganado todas las elecciones convocadas desde 2001.
Unos 51 millones de tailandeses están llamados a ir a las urnas casi cinco años después de que el Ejército tomara el poder en 2014.
"Quiero un cambio, un tortazo a los conservadores"
Los jóvenes tienen clara su postura. Algunos comenzaron a interesarse por la política tras el golpe de Estado de hace cinco años, y creen que los militares son "populistas" y que no saben gestionar la economía del país. Pero, ante todo, tienen claro que quieren "derribar" los poderes tradicionales. Quieren un cambio.
Nichanan Pudkont, un estudiante de 21 años de Ciencias Políticas en Bangkok, explica a EFE que cree que "estas elecciones serán una batalla entre los viejos poderes y la democracia".
"Voy a votar al Anakot Mai porque son los únicos que quieren derribar los poderes tradicionales y quiero cambio, es como un tortazo en la cara a los conservadores" dice Saharath Phautraungsee, estudiante de Filología Española en la Universidad de Chulalongkorn, en Bangkok.
"El gobierno militar ha sido realmente malo en materia económica, no tienen ni idea de cómo usar el presupuesto y sus políticas populistas no son sostenibles," explica Pichailak Kullwuttanapan, estudiante de segundo de Económicas que también a votar por primera vez, aunque prefiere no decir a qué partido.
"El problema de la sociedad tailandesa es la polarización y el enfrentamiento entre los dos bandos, pero creo que eso sucede menos con los jóvenes, que tenemos una mente más abierta y queremos que el país progrese" sentencia Chalisa Kittirojrattana, de 22 años, que afirma que comenzó a interesarse en la política tras el golpe de Estado.
La princesa Ubolratana intentó presentarse a las elecciones
La princesa Ubolratana, hermana del rey de Tailandia, se presentó el pasado febrero como candidata a primera ministra, pero a las pocas semanas tuvo que renunciar a su candidatura.
El partido Thai Raksa Chart fichó a la princesa de 67 años, hija mayor del rey Bhumibol, que falleció en 2016. "El partido Thai Raksa Chart está profundamente honrado por recibir la gentileza de Ubolratana Mahidol en aceptar la nominación del partido como primera ministra", dijo el partido poco después en un comunicado.
A raíz de las críticas y la incertidumbre, un experto aseguró que "no hay ningún artículo que prohíbe la participación de la monarquía en los asuntos políticos, pero es una tradición desde hace mucho tiempo que la Monarquía debe ser neutral". La candidatura de Ubolratana fue tildada por el rey tailandés de “inaceptable”.
Pero al poco tiempo, la princesa tuvo que renunciar a su candidatura. Dijo, tras anunciar su renuncia, que le gustaría "decir de nuevo que quiero ver a Tailandia avanzar, ser admirable y aceptable para otros países, ver que todos los tailandeses tienen derechos, oportunidades, una buena vida y felicidad".
El partido por el que la princesa se presentó a las elecciones fue disuelto por "acción hostil" contra la nación y su sistema político, así como su monarquía constitucional.