Tetsuya Yamagami tiene 41 años, trabajó para el Ejército de Japón y se encontraba desempleado. El pasado viernes, acudió a un mitin del exprimer ministro Shinzo Abe en Nara y le disparó dos veces. Abe murió desangrado y Yamagami fue detenido. Ahora, ha testificado y contado que todo respondía a un plan.
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El asesino comenzó a preparar de forma minuciosa el atentado en otoño, según han podido determinar los investigadores a través de su testimonio y corroborado en los registros en sus dispositivos electrónicos y domicilio. El germen sería un mensaje de vídeo grabado por Abe en septiembre para una organización afín a la Iglesia de la Unificación, que Yamagami "odia".
De hecho, el criminal ha explicado que esa organización religiosa le había deparado problemas familiares. Su madre era miembro activo y habría realizado donaciones que la habrían conducido a la quiebra. Yamagami pensó en matar a alguno de sus líderes, pero ver a Abe apoyar a este colectivo parece que hizo cambiar su objetivo, apuntando más alto.
Muere Shinzo Abe
El atentado pudo haber ocurrido el jueves, en otro mitin de Abe en un auditorio con acceso restringido, pero la tarea era más sencilla horas más tarde, al aire libre y con muy leves medidas de protección en un país por otra parte considerado como uno de los más seguros del mundo. A pie de calle, frente a una estación de tren.
Un arma letal
Yamagami ya estaba allí hora y media antes de que comenzara el acto, buscando un buen lugar desde el que disparar, recogen las cámaras de seguridad. Lo hizo a una distancia de siete metros el primer tiro y de cinco el segundo, ambos por la espalda.
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Lo hizo con un arma de fabricación casera compuesta de dos tubos de metal sujetos con cinta adhesiva y armados sobre un panel de madera, capaz de lanzar hasta seis proyectiles en cada disparo, lo que le concedía mayor precisión y letalidad, ha detallado el propio arrestado.
Yamagami recibió formación sobre el montaje y uso de armas de fuego cuando trabajó para el ejército, entre 2002 y 2005. Hace un año comenzó a hacerlas inspirándose en vídeos que encontró en la red. La pólvora empleada fue adquirida también por internet.