Un periodista de la BBC, "golpeado" y detenido en Shanghái en las protestas contra el régimen de Xi

El cámara de la BBC Ed Lawrence fue "golpeado" por la policía, "esposado y detenido" este domingo en Shanghái mientras cubría la ola de protestas contra la política 'cero Covid' del régimen de Xi Jinping, por la que China, país donde se originó el virus, sigue bajo las más duras restricciones mientras el resto ha vuelto a la práctica normalidad con una exitosa campaña de vacunación.

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Ha sido la cadena pública británica la que ha denunciado la agresión y el arresto: "La BBC está extremadamente preocupada por el trato que recibió nuestro periodista. No hemos tenido ninguna explicación o disculpa oficial de las autoridades chinas, más allá de una afirmación de los funcionarios que luego lo liberaron de que lo habían arrestado por su propio bien para que no se contagiara entre la multitud”, ha dicho un portavoz.

En su cuenta en Twitter, Lawrence ha denunciado que al menos un ciudadano fue también llevado por los agentes intentando protegerle, que dejaran de pegarle.

Los medios de comunicación en China están preocupados por sus profesionales ya que las autoridades locales tratan a toda costa tanto de contener las protestas como que éstas no trasciendan.

"¡Abajo Xi Jinping!"

Michael Peuker, corresponsal de la televisión pública suiza RTS, también fue "brevemente detenido" este domingo, tras una conexión en la que avisó de que estaba "rodeado por tres agentes", a los que en pleno directo hacía gestos pidiendo calma. Peuker y su cámara fueron liberados tras "muchos minutos de negociaciones". Los agentes retuvieron sus grabaciones para "verificar" su contenido.

Las protestas aumentan en número e intensidad no sólo en Shanghái, también en Pekín, Nanjing o Wuhan, muchas de ellas originadas en memoria de las diez personas que murieron el jueves en un incendio en un edificio confinado en Urumqi, la capital de Xinjiang.

La prensa oficial no está contando estos hechos, que se conocen precisamente por informadores extranjeros. En algunas ciudades, los gritos no solo se dirigen a las medidas antiCoivid, sino que apuntan más alto: "¡Abajo el Partido Comunista, abajo Xi Jinping!".