El Ministerio de Justicia francés ha confirmado el fin del secuestro en la cárcel de Le Mans-Les Croisettes, al oeste de Francia, en torno a las 14:00 de este jueves. Había informado del secuestro de un vigilante penitenciario. Aunque la cadena BFM TV aseguró que además había otro prisionero secuestrado, las autoridades penitenciarias lo han desmentido.
"Un preso que se encontraba en el interior de la celda, tomó las llaves del vigilante y cerró la celda. Fue a dar las llaves al jefe del edificio para anunciarle que había una toma de rehenes. El segundo preso en la celda decía que estaba secuestrado, pero puedo asegurarles que no", ha manifestado un portavoz penitenciario en declaraciones recogidas más tarde por la misma televisión francesa.
El secuestrado mantuvo pues retenido al vigilante en esa celda después de haberle amenazado con un objeto afilado -inicialmente se informó de que era un cuchillo. La toma del rehén sucedió desde las 10:40 hasta algo antes de las 14:00 de esta mañana. Reclamaba ser transferido a otra prisión, según una fuente sindical citada por la cadena.
De acuerdo con esta información, deseaba ser transferido a Alençon-Condé, una cárcel que acoge a los presos más peligrosos y en 2014 fue escenario de numerosos episodios de violencia provocados por los reos (incluidas agresiones a funcionarios penitenciarios y tomas de rehenes), según los medios franceses.
Ambos secuestrados han sido liberados y el preso secuestrador está siendo interrogado. Se trata de un hombre condenado por tráfico de estupefacientes que debe cumplir condena hasta 2021, según la fuente sindical.