La Policía belga ha arrestado a cinco sospechosos de provocar un incendio en el Instituto Nacional de Criminalística y Criminología de Bruselas con el objetivo aparente de eliminar archivos del centro forense. Los detenidos han sido puestos en libertad sin cargos tras ser interrogados, según informa la Fiscalía de Bruselas.
"Está claro que los sospechosos tenían el interés de hacer desaparecer elementos de sus expedientes", ha afirmado la Fiscalía belga.
Aunque no descartan que pueda tratarse de un ataque terrorista, ésta no es la hipótesis principal de las autoridades belgas, que se inclinan más por una acción del crimen organizado.
Si bien se registró una explosión en el edificio, la Fiscalía descarta que se tratase de una bomba y apuntan a un fuego provocado. “Ha sido un incendio deliberado en el laboratorio de la Policía federal”, ha señalado una portavoz en declaraciones recogidas por Reuters. “No es que lanzasen explosivos o los instalasen en el interior”.
Contrario a algunas informaciones que aseguraban que los sospechosos utilizaron un coche para entrar en el inmueble, la Fiscalía ha aseverado que forzaron las vallas del edificio y luego prendieron fuego a su vehículo.
El Instituto, asociado al Ministerio de Justicia, está situado en el barrio norteño de Neder-Over-Heembeek, donde residía Bilal Hadf, uno de los terroristas suicida de los atentados de París del pasado noviembre.