La policía británica conocía a Salman Abedi, el terrorista suicida que ha acabado con la vida de 22 personas en un atentado tras el concierto de Ariana Grande en Manchester. Abedi, de 22 años, figuraba en el radar de las autoridades pero no estaba siendo investigado y tampoco han transcendido antecedentes por radicalización.
Abedi había regresado hace tan solo unas semanas de Libia. Las agencias de inteligencia y la policía tratan de averiguar si fue entrenado en un campo yihadista del país, donde el Estado Islámico y Al Qaeda se han aliado para luchar en contra de las fuerzas del Gobierno, informa The Times.
La investigación se centra ahora en los presuntos vínculos de este mancuniano de familia libia con el Estado Islámico (EI). Como viene siendo habitual, la organización terrorista se ha apresurado este martes a asumir la autoría del ataque. En un comunicado difundido a través de su aparato de propaganda, la organización terrorista ha precisado que uno de sus "soldados" era el responsable de la masacre en el Manchester Arena.
Sin embargo, la policía británica no ha encontrado todavía ninguna prueba de su relación con el EI. El diario The Guardian, que cita fuentes de la investigación, apunta que el perfil del terrorista de Manchester se asemeja al del responsable del ataque en Westminster, Khalid Masood, que atropelló a varias personas y acuchilló a un agente frente al Parlamento, también era británico pero no había sido fichado por radicalización islámica. En los archivos policiales solo figuraba un largo historial delictivo plagado de episodios de alteración del orden público.
El circulo familiar de Abedi centra ahora las pesquisas con un objetivo: determinar si el terrorista actuó solo o contó con ayuda. Ante la posibilidad de que el atentado fuera parte de una trama terrorista a mayor escala, el Reino Unido subió ayer el nivel de alerta terrorista al máximo. La primera ministra Theresa May explicó anoche desde Downing Street que esta decisión, que se tomó por última vez en 2007, significa que "puede producirse otro ataque de manera inminente".
Este mismo martes, la Policía arrestó a un hombre de 23 años en relación con el atentado. No hay más detalles sobre su grado de implicación, pero los medios británicos apuntan que el arresto se produjo en una dirección cercana a la vivienda de la familia del sospechoso.
Los Abedi son una familia de refugiados libios que llegó a Reino Unido huyendo del régimen de Gadafi. Salman, que tenía dos hermanos, era conocido en la comunidad libia de Manchester. “Era una persona muy tranquila y muy respetuosa. Su hermano Ismail es menos introvertido pero no me creo que Salman sea el responsable de esto”, ha comentado un conocido de la familia al Guardian.
Sin embargo, Mohamed Saeed, imán de la mézquita de Didsbury, asegura al diario británico que Salman le miró “con odio” tras dar un sermón criticando al Estado Islámico hace un par de años.