La primera ministra británica, Theresa May, ha dicho a sus diputados en un encuentro cerrado que seguirá al frente "el tiempo que ustedes quieran" y ha aceptado la responsabilidad de que el Partido Conservador perdiera la mayoría absoluta en las elecciones anticipadas de la semana pasada.
"Yo nos metí en este lío y nos sacaré", ha dicho la premier según han confirmado fuentes presentes en la reunión a la BBC, que han descrito su intervención como "humilde pero firme" o incluso "brillante".
Los diputados parecen dispuestos a que la ex ministra del Interior siga gobernando por ahora. "Todos los diputados conservadores dijeron que seguían con Theresa May. En lo que a mí respecta, eso no ha cambiado", ha tuiteado la parlamentaria conservadora Sarah Wollaston.
El Gobierno británico, sin embargo, ha dado a entender a que pospondrá el tradicional Discurso de la Reina, que da inicio a la legislatura, previsto para el próximo lunes 19. La alocución, preparada por el Gobierno pero pronunciada por la monarca, detalla la agenda política del Ejecutivo.
Mientras tanto, los conservadores intentan cerrar un acuerdo con el derechista Partido Unionista Democrático de Irlanda del Norte (DUP) para poder gobernar con su apoyo tras el descalabro de las elecciones de la semana pasada, en las que los tories perdieron su mayoría parlamentaria.
En un esfuerzo por mantenerse en el poder, May ha incorporado a su Gobierno a antiguos rivales políticos como el Michael Gove, que ostentará la cartera de Medio Ambiente y compitió con la premier en las primarias del Partido Conservador celebradas tras el referéndum del brexit.
Tras el Discurso de la Reina, la Cámara de los Comunes llevará a cabo una votación sobre el plan de gobierno. Un votación contraria a May podría suponer su fin. En los años 20 el Partido Conservador perdió la mayoría en unas elecciones parlamentarias y la votación del discurso de la reina, lo que dio paso a un Ejecutivo laborista.