La Policía holandesa ha detenido a primera hora de este jueves a un segundo sospechoso en el sur de Países Bajos, en relación con la "amenaza terrorista" detectada el miércoles en un concierto de rock en Róterdam, por la que ya fue arrestado ese mismo día un ciudadano español, según ha informado la cadena neerlandesa NOS.
El español fue detenido por conducir una camioneta cargada de bombonas de gas. Fuentes de la lucha antiterrorista consultadas por Europa Press han indicado que estaba ebrio y, en principio, no tiene ningún vínculo con el terrorismo yihadista.
Aunque las fuentes precisan que todavía no existe "confirmación definitiva" que descarte el vínculo del detenido con el terrorismo yihadista, las bombonas que portaba en la furgoneta, que tenía matrícula española, serían para uso doméstico.
La Guardia Civil había avisado a las autoridades de Países Bajos de la "amenaza" de que se produjera un atentado en Róterdam durante un concierto.
Tras ese aviso, las autoridades holandesas suspendieron un concierto de rock en la sala Maassilo, donde estaba prevista la actuación del grupo estadounidense Allah-las. Según el alcalde de la ciudad, Ahmed Aboutaleb, el chivatazo era lo suficientemente serio como para no correr ningún riesgo.
Países Bajos se encuentra en nivel cuatro de alerta por posibles ataques terroristas, sólo uno por debajo del máximo, lo cual implica asumir que existe un riesgo alto de que se produzca un atentado.
Allah-las reveló en una entrevista a The Guardian en agosto de 2016 que habitualmente recibían correos electrónicos de personas musulmanas que decían sentirse "ofendidas" por el nombre, pero el cantante, Miles Michaud, alegó que lo habían elegido simplemente porque "sonaba a sagrado", inspirados por la banda escocesa The Jesus and Mary Chain.
"Les respondemos y explicamos por qué elegimos el nombre y, por lo general, lo entienden", explicó el líder de Allah-las al periódico británico. Michaud insistió en que la "intención" del grupo de rock no era ofender a ninguna creencia religiosa.