Al menos cinco personas han muerto y otras 15 personas resultaron heridas cuando un autobús urbano irrumpió en la acera y se precipitó en la entrada de una estación de metro, en el oeste de la capital rusa, según informaron las autoridades locales.
En las imágenes divulgadas por medios locales se puede ver cómo el autobús baja a gran velocidad por la escalera del paso subterráneo que da a la estación de metro Slaviánski Bulvar, donde habría aplastado a varios transeúntes.
Fuentes oficiales descartan la hipótesis del atentado. De acuerdo con la versión policial, el atropello masivo podría haberse debido a un fallo técnico o a que el conductor del autobús, que se encuentra detenido y ha dado negativo en la prueba de alcoholemia, perdiese el control del vehículo.
El conductor explicó a los investigadores que el vehículo "estaba parado y luego empezó a moverse de forma inesperada".
"Pese a los intentos de frenar el autobús, el sistema de freno no funcionó y el autobús prosiguió su carrera", afirmó, según un comunicado del comité de investigación.
El accidente ocurrió en día laborable, ya que la Navidad ortodoxa en Rusia se celebra el 7 de enero, siguiendo el calendario juliano.
En los últimos meses las autoridades locales han tomado medidas especiales de seguridad para evitar atropellos masivos perpetrados por terroristas.