El ministro belga del Interior, Jan Jambon, ha confirmado que Benjamin Herman, el autor del tiroteo ocurrido el martes en Lieja (Bélgica) en el que fallecieron dos mujeres policía y un civilm había matado a otro hombre la noche anterior.
En una entrevista a la radio Bel-RTL, Jambon señaló que el atacante es también responsable de la muerte de Michaël Wilmet, un heroinómano cuyo cadáver fue encontrado el martes por la mañana en su domicilio de On, en la provincia de Luxemburgo.
El motivo de esta muerte no está claro todavía, según el ministro.
"Pueden ser motivos de radicalización pero también puede que no tuviera ninguna perspectiva en nuestra sociedad, porque cometió asimismo un asesinato la noche anterior. La psicología de este tipo, que puede que también estuviera drogado, plantea muchas cuestiones. Antes de extraer conclusiones hay que esperar el resultado de la investigación", dijo el ministro.
Michaël Wilmet estaba fichado por la policía por un delito de tráfico de drogas y había estado durante dos años bajo vigilancia electrónica.
Heman, recién salido de la cárcel con un permiso temporal, mató el miércoles a dos mujeres policía y a un civil e hirió a otros cuatro agentes en la ciudad de Lieja, en un intercambio de disparos durante el cual fue abatido y que es investigado por la Fiscalía federal como un "delito terrorista".
El ministro de Justicia, Koen Geens, confirmó el martes que Heman, que había salido el día anterior de la prisión de Lantin, donde cumplía condena por delitos menores, había disfrutado de un total de 13 permisos carcelarios.
La Fiscalía federal belga ha confirmado que el hombre gritó varias veces "Alá es grande" durante el ataque y estaba en contacto con personas radicalizadas".
El portavoz de la Fiscalía, Eric Van Der Sypt, ha dicho en rueda de prensa en la que confirmó que se investigan los hechos como "asesinato terrorista e intento de asesinato terrorista" que "atacó a dos agentes de la policía de Lieja con un cuchillo, por la espalda" y las remató en el suelo con sus propias armas, entró varias veces en un café cercano y después disparó contra un coche, matando al joven civil.