La UE sanciona a la vicepresidenta de Venezuela y otros 10 altos cargos de Maduro

La Unión Europea sube un peldaño más en su goteo de sanciones al régimen de Nicolás Maduro. Una estrategia cuyo objetivo es forzarle a negociar con la oposición una salida política a la crisis que vive Venezuela, pero que hasta ahora ha resultado fallida. Los ministros de Exteriores de los 28 han impuesto este lunes sanciones a la número dos de Maduro, la vicepresidenta Delcy Rodríguez, y a otros 10 altos cargos de su Gobierno. De momento, el presidente venezolano se salva de ser incluido él mismo en la lista negra. 

"Las personas en la lista son responsables de vulneraciones de los derechos humanos y de socavar la democracia y el Estado de derecho en Venezuela", señalan las conclusiones aprobadas por la UE en una reunión celebrada en Luxemburgo. Las sanciones consisten en la congelación de las cuentas bancarias en Europa y la prohibición de viajar a territorio comunitario.

Con la decisión de este lunes, el número de altos cargos de Maduro sancionados por la UE asciende ya a 18. En enero se incluyó en la lista negra una primera tanda de 7 dirigentes, entre ellos Diosdado Cabello. Además, los 28 han decretado un embargo de armas a Venezuela.

Borrell insiste en el diálogo pese a las sanciones

El endurecimiento de las sanciones contra el régimen de Maduro se ha aprobado el día del estreno en una reunión de la UE del nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell. Borrell no ha cambiado la posición sobre Venezuela de su antecesor, Alfonso Dastis, pero sí ha puesto más énfasis en la necesidad de buscar soluciones políticas a la crisis venezolana.

Las sanciones de la UE "no excluyen en ningún caso la voluntad de diálogo", ha subrayado Borrell. "El nuevo Gobierno español va a poner más si cabe el énfasis en la necesidad de encontrar soluciones políticas a la situación en Venezuela que no se van a resolver únicamente a base de sanciones", ha dicho en rueda de prensa durante una pausa de la reunión de ministros de Exteriores de los 28 en Luxemburgo.

La UE insiste en que las elecciones presidenciales celebradas en Venezuela el pasado 20 de mayo "no fueron libres ni justas y su resultado carece de credibilidad porque el proceso electoral no garantizó las garantías necesarias para que fueran inclusivas y democráticas". Los 28 exigen a Maduro nuevos comicios, así como la liberación de todos los presos políticos y el respeto del Estado de derecho y los derechos humanos.