Las autoridades italianas ya han identificado a 19 de los fallecidos tras derrumbarse este martes el tramo de un puente en la ciudad de Génova (al noroeste del país transalpino).
Las autoridades de la región de Liguria, a la que pertenece Génova, informaron en una nota de que la cifra oficial de muertos es de 26, dos de los cadáveres acaban de ser recuperados, y de ellos 19 han sido ya identificados, a causa de un derrumbe que ha dejado además 16 heridos, diez de estos graves.
Existe en estos momentos cierta discrepancia con el balance de muertos, pues el ministro italiano del Interior, Matteo Salvini, ha dicho a los medios en la isla de Sicilia, donde se encuentra, que los fallecidos eran una treintena, mientras que Protección Civil ha hablado de una veintena.
Las autoridades de Liguria también han indicado que han sido desalojadas 432 personas de 11 edificios cercanos a la zona del derrumbe, como medida de prevención para evitar riesgos derivados de posibles desplomes.
El suceso ocurrió en torno a las 12.00 hora local (misma hora en la España peninsular y las 10.00 GMT), cuando un tramo de unos 100 metros del puente Morandi, que tiene un kilómetro de longitud y una altura de 90 metros, se vino abajo y sepultó bajo los escombros a varios vehículos.
#CrolloPonteMorandi Aggiornamento, estratti altri 2 cadaveri. Salgono a 26 i morti ufficiali: 23 sul posto, 1 in sala operatoria e gli ultimi 2 estratti. Restano 15 feriti di cui 9 rossi
— Regione Liguria (@LiguriaOnLine) 14 de agosto de 2018
El viaducto transcurre sobre una zona urbana en la que hay centros comerciales, edificios residenciales y áreas industriales.
Inicialmente se apuntó a que las fuertes lluvias podrían ser la causa del siniestro.
Estado de las carreteras italianas
Sin embargo, durante el día la compañía encargada de la gestión y manutención de la autopista -Autoestrade per l'Italia, filial de Atlantia- señaló en un comunicado que estaba trabajando actualmente para asegurar el pavimento del viaducto.
Se ha generado entonces un debate sobre el estado de las carreteras y el Gobierno italiano ha garantizado que se exigirán responsabilidades.
"Es uno de los tramos más caros de Italia. Si alguien ha sacado beneficio y no ha realizado el debido mantenimiento, deberá responder", declaró Salvini a la televisión.
También el ministro italiano de Infraestructuras, Danilo Toninelli, avanzó que se abrirá una investigación para comprobar si "se han llevado a cabo los suficientes controles de mantenimiento" en el puente.
"Un puente de este tipo no cae ni por un rayo ni por un temporal, los responsables deben ser identificados", consideró por su parte el viceministro de Infraestructuras, Edoardo Rixi.
Este miércoles está previsto que el Gobierno italiano celebre una reunión extraordinaria en Génova para evaluar la situación y decidir qué acciones tomar.