El líder opositor venezolano, Juan Guaidó, ha pedido este miércoles a la Unión Europea que le siga considerando como presidente encargado de Venezuela y redoble la presión sobre el régimen de Nicolás Maduro con más sanciones. Guaidó alega que las elecciones legislativas celebradas el pasado 6 de diciembre "no fueron libres" y por tanto "no tienen efectos prácticos" a la hora de sustituir a la actual Asamblea Nacional, controlada por la oposición y de la que emana su mandato de presidente encargado.
"Ese proceso es ilegítimo e ilegal, por lo que no hay una nueva autoridad electa. Es el deber de los parlamentarios defender la constitucionalidad y no permitir un vacío de poderes, que es lo que pretende Maduro. Maduro pretende aniquilar la alternativa y la interlocución legítima de Venezuela para tratar de confundir", ha dicho Guaidó en una rueda de prensa virtual desde Caracas organizada por el grupo de Ciudadanos en el Parlamento Europeo.
Los ministros de Asuntos Exteriores de la UE acordaron el pasado lunes por unanimidad no reconocer, por falta de garantías democráticas, los resultados de las elecciones legislativas, en las que el Gran Polo Patriótico -la plataforma de Nicolás Maduro- obtuvo el 67,6% de los votos, con una participación del 31%.
Sin embargo, los Veintisiete han aplazado la decisión sobre si mantendrán o no su reconocimiento de Juan Guaidó como presidente encargado. Los Gobiernos seguirán discutiendo qué hacer -en cooperación con el resto de la comunidad internacional- de aquí hasta el próximo 5 de enero, cuando deben tomar posesión los nuevos parlamentarios elegidos este domingo.
Josep Borrell y Arancha González Laya, este lunes durante la reunión de ministros de Exteriores de la UE
Para Guaidó, el rechazo de la UE al fraude electoral en Venezuela es "insuficiente". Los Veintisiete deben dar un paso más y respaldar la "continuidad constitucional de la Asamblea Nacional", así como redoblar la presión sobre Maduro con más sanciones a los dirigentes de su régimen por vulnerar los derechos humanos.
"El reconocimiento a la interlocución legítima del país, al parlamento nacional, es la piedra angular de una solución, es la piedra angular de lograr una transición en Venezuela", sostiene el líder opositor. "Es un tema de reconocimiento a nuestra Constitución. Y nuestra Constitución prevé en el artículo 233 que el presidente encargado es presidente hasta lograr una elección legítima", ha insistido.
Retirar el reconocimiento a la Asamblea Nacional actual y a su figura como presidente encargado equivaldría a "reconocer a nivel mundial que la tortura, la persecución, la censura, son una herramienta útil para los dictadores para mantenerse un día más en el poder sin que tenga consecuencias en el mundo libre".
Guaidó ha rechazado la última oferta de diálogo de Maduro como un intento de "ganar tiempo" y "engañar". A su juicio, la única solución para salir de la crisis es la celebración de elecciones legislativas y presidenciales libres y justas, un objetivo en el que según ha dicho coincide toda la oposición al régimen pese a sus divisiones internas.
"Nunca hemos tenido tanta unidad en Venezuela, pese a las diferencias públicas que puede haber, como en esta etapa del país. No es por eso que Maduro sigue o no sigue usurpando funciones. Es porque es un dictador brutal que destruyó el Estado de derecho en Venezuela", ha asegurado.
¿Qué cambiará entonces para Guaidó el próximo 5 de enero? "El 5 de enero estaré en Caracas, a pesar de los riesgos y amenazas nuevas de parte de la dictadura, ejerciendo funciones para establecer el Estado de derecho y la democracia en Venezuela", responde el líder opositor.