Una semana después, Yuriy está despertando del coma pero no se ha dado aún con ningún resposable del "increíble atentado de salvajismo", en palabras del ministro de Interior francés, Gérald Darmanin, que se produjo cuando una decena de personas se lanzó contra él con bates de béisbol y muletas.
El pasado viernes 15 de enero, el adolescente se encontraban junto a otros cuatro estudiantes universitarios cerca del centro comercial del Beaugrenelle, en el distrito 15 de París, cuando un grupo de personas aparecieron armados con bates de béisbol y muletas.
Los jóvenes lograron escapar. Todos excepto Yuriy, que tropezó y se quedó inmovil en el suelo frente a los atacantes, como se aprecia en un vídeo que circula por las redes sociales. En las imágenes se ve a diez individuos golpeando a una persona antes de huir en varias direcciones.
La madre del adolescente, Nataliya, ha confirmado al diario francés Le Figaro que su hijo está empezando a despertar "lentamente", y que lo encuentra "muy agitado".
"Los médicos me dicen que es normal. Todavía está intubado y aún no ha hablado”, explica.
Los profesionales del hospital han comenzado a despertar al menor después de una semana de coma y una operación de seis horas. El primer certificado médico mostraba un traumatismo craneoencefálico con varias fracturas graves, un hematoma entre el cerebro y el cráneo y una contusión cerebral, además de fractura de nariz y dedo.
A pesar de todo, según recoge Nataliya, los médicos "están comenzando a ser relativamente optimistas". "Nos explican todo con mucha paciencia, gracias a ellos también tenemos esperanza", añade la madre que ahora pasa sus días en la habitación del hospital, trabajando a distancia con su ordenador.