El Gobierno portugués ha decidido crear una plataforma para que todos los inmigrantes del país, incluidos los que no tienen papeles, se puedan vacunar contra la Covid-19. El plan de vacunación diseñado por el país, tiene "carácter universal" y se destina a todas las personas que vivan en territorio portugués. Sin embargo, los inmigrantes en situación irregular, sin número de Seguridad Social ni tarjeta sanitaria, no están en el radar de las autoridades que no tienen forma de convocarles a la vacunación.
Para solucionarlo, el Gobierno ha creado una plataforma online donde los inmigrantes deben dejar sus datos para que las autoridades competentes puedan contactarles cuando llegue su turno.
Para que la información llegue al segmento poblacional afectado, el Gobierno, a través del Alto Comisionado para las Migraciones, ha enviado a las asociaciones del sector un correo electrónico con la página web del Ministerio de Sanidad y todas las instrucciones. Los interesados deberán rellenar los datos: el nombre, la fecha de nacimiento, el país de nacimiento y nacionalidad, su dirección y número de teléfono en donde pueda ser contactado.
En el terreno, las asociaciones hacen ahora una labor muy importante de divulgación de la plataforma, para que la información llegue a todos los interesados y para solucionar las dudas que puedan surgir.
Inmigrantes regularizados
La iniciativa es un intento de no dejar a un lado a uno de los segmentos poblacionales más vulnerables ante la pandemia. En marzo de 2020, al inicio de la pandemia, Portugal ya había decidido regularizar de manera exprés a todos los inmigrantes que estaban pendientes de la autorización de residencia.
"Es un deber de una sociedad solidaria en tiempos de crisis asegurar el acceso de los ciudadanos inmigrantes a la salud y seguridad social", explicó el ministro de Interior, Eduardo Cabrita, entonces.
La medida permitió, según las autoridades oficiales, que más de 56.000 personas consiguieran su tarjeta sanitaria en 2020. Además, un decreto del Gobierno determinaba que las situaciones de riesgo para la salud pública están cubiertas por el Servicio Nacional de Salud y que los inmigrantes irregulares tienen aseguradas las mismas condiciones que los portugueses.
Pese a todo, los informes indican que los inmigrantes fueron uno de los sectores de la población más afectados por la pandemia, representando a un cuarto de los infectados.
Ahora, el Alto Comisionado para las Migraciones señala que está colaborando con la Dirección General de Sanidad para publicar las instrucciones específicas para la población migrante y refugiada, como las que flexibilizan los procedimientos para conseguir la tarjeta sanitaria y las líneas de apoyo.
La medida se encuadra en la petición de la Organización Internacional de Migraciones que pidió, en enero de este año, que "los gobierno incluyan a los inmigrantes en sus planes de vacunación". "Se trata de utilizar para los inmigrantes en sus territorios los mismos criterios que se utilizan para sus propios ciudadanos, en lo que se refiere al riesgo, edad y vulnerabilidad, para garantizar la protección de toda la comunidad", insistió el director general de la OIM, António Vitorino, en una entrevista.
En la misma entrevista, Vitorino señalaba que una de las trabas a la hora de que los inmigrantes pudiesen acceder a los cuidados de salud era el miedo a ser detenidos en esos momentos. Para ello, insistía, hace falta "adoptar los mecanismos necesarios para que haya la seguridad de que el proceso de vacunación y los cuidados de salud no serán utilizados para aplicar las leyes de inmigración".