El pasaporte Covid llega a las urnas. Suiza votará este domingo para decidir si la exigencia del documento que certifica la vacunación continúa o se detiene. En el país alpino, el documento es necesario desde el pasado 13 septiembre para acceder a la hostelería, gimnasios, cines y grandes eventos culturales y deportivos.
Suiza se convierte así en el primer país en decidir el futuro del certificado Covid por votación popular. Y lo hace con una de las tasas de vacunación más bajas de Europa. Tan sólo el 65,7% de la población tiene la pauta completa de la vacuna contra el coronavirus. Como en sus países vecinos, los contagios se han disparado exponencialmente. Este pasado viernes se notificaron 8.033 nuevos contagios y la incidencia por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días se sitúa en torno a los 850 puntos.
En junio, los suizos ya votaron para aprobar una ley que servía a su Gobierno como instrumento para tomar medidas contra la Covid-19. El borrador de ley fue avalado por la población con un 60% de los votos a favor, por lo que fue posible que las autoridades implementaran el certificado oficial de vacunación, lo cual ya suscitó dudas y críticas entre la población antivacuna.
En septiembre, cuando el documento se convirtió en imprescindible, algo tan cotidiano como ir a un bar a tomar una cerveza ya no era fácil para la población no vacunada. El Gobierno pensaba que su obligatoriedad para poder disfrutar del ocio y la hostelería iba a promover la vacunación, pero sucedió lo contrario. Miles de personas salieron a manifestarse para exigir "libertad" mientras recogían firmas para solicitar un reférendum e intentar derrocar la ley que permite el uso del certificado Covid en la actualidad
Finalmente, tres comités de referéndum presentaron las suficientes firmas consideradas válidas por la Cancillería Federal en contra de la ley que permitía el certificado de inmunización contra la Covid. Su objetivo —erradicar este documento— aún no se ha cumplido, ni parece que se cumplirá, pero ha llegado a las urnas y este domingo su continuidad estará en manos de toda la población.
Robert Kennedy Jr., la figura
Robert F. Kennedy Jr., hijo del antiguo fiscal general estadounidense Robert F. Kennedy y sobrino del expresidente de Estados Unidos John F. Kennedy, se ha convertido en un ariete del movimiento antivacunas, y en Suiza tuvo una aparición estrella.
El pasado 12 de noviembre se celebró una manifestación contra la vacuna y el pasaporte Covid en Berna. Sobre un escenario hablaron varias celebridades, y allí estaba el sobrino del expresidente Kennedy, que calificó a Suiza como la última esperanza de la libertad y la democracia.
"Suiza es el último bastión de la democracia en Europa. Salid a la calle, llamad a vuestros vecinos, explicadles lo que está en juego y votad en estas elecciones [el referéndum de este domingo]. Tenemos que amar más que nunca a nuestra libertad", afirmó Robert Kennedy Jr. durante su discurso en una plaza abarratoda de gente —no llevaban mascarilla— que rugía en apoyo a sus palabras.
El sobrino del expresidente estadounidense ha publicado un libro recientemente titulado The Real Anthony Fauci: Bill Gates, Big Pharma, and the Global War on Democracy and Public Health (El verdadero Anthony Fauci: Bill Gates, grandes farmacéuticas, y la guerra global contra la democracia y la salud pública, en castellano). El libro está siendo un best seller en Estados Unidos.
Su obra acusa y "detalla" —según relata la sinopsis— cómo Fauci, científico que trabaja en el comité de la Casa Blanca que monitorea la Covid-19 desde enero de 2020, Bill Gates y su "grupo de cohortes" utilizan su control sobre los medios de comunicación, revistas científicas y agencias gubernamentales para "inundar" a la población de propaganda falsa sobre la Covid.
Qué más se vota
La ley Covid que permite el certificado de vacunación en Suiza no es lo único por lo que este domingo votan los suizos. La mejora de condiciones para la enfermería es la otra cuestión en juego. Enfermeras suizas han reunido suficientes firmas para llevar sus exigencias a las urnas.
Reclaman mejores condiciones de trabajo, en particular sueldos más altos, y más inversión en su disciplina. Se estima que en torno a un 10% de enfermeras suizas han dejado el trabajo desde que estalló la pandemia por el coronavirus. Un último sondeo nacional muestra que el 67% de la población apoya las medidas exigidas por el sector, aunque el Parlamento considera que sus propuestas son exageradas.
El pasaporte Covid, las condiciones de trabajo de las enfermeras... y el sistema judicial. Con el procedimiento actual, el parlamento elige a los jueces del Tribunal Federal —equivalente al Tribunal Supremo en España—. La propuesta de este domingo sometida a escrutinio popular quiere que los jueces sean elegidos por sorteo para así garantizar su independencia política. El Parlamento suizo y el Gobierno ya se han mostrado en contra de la medida. Abogan por el sistema actual, argumentando que funciona bien y es independiente.
El modelo de democracia directa hace que los referéndums sean algo habitual en Suiza. Muchas de las propuestas de sectores de la ciudadanía que se someten al voto popular se quedan en eso mismo, propuestas, y no avanzan. Para el llamado a las urnas de este domingo para decidir el futuro del certificado de vacunación —que se postula como la cuestión más relevante, más con la subida de contagios—, los sondeos apuntan a que el "sí" se impondrá al "no" y el documento de vacunación continuará.
Europa se blinda
Mientras que en Suiza deciden si darle continuidad al uso del pasaporte Covid, los países de la Unión Europea acordaron este viernes protegerse de la nueva variante ómicron, proveniente del sur de África, prohibiendo todos los vuelos procedentes de Sudáfrica y otros 6 países de la región: Botsuana, Esuatini, Lesoto, Mozambique, Namibia y Zimbabue.
Los 27 países han hecho uso del denominado "freno de emergencia" que prevé la normativa de la UE para interrumpir los viajes en caso de que se detecte una variante de riesgo de la Covid-19. Su base legal es una recomendación sin valor vinculante, pero todos los Gobiernos están de acuerdo en esta ocasión para aplicar la suspensión de vuelos.
La mutación es altamente contagiosa y los grandes fabricantes de las vacunas ya están verificando la efectividad de sus dosis contra ómicron para bajarar un ajuste si se determina que la mutación es resistente.
Este viernes Bélgica notificó el primer caso de la nueva variante en suelo europeo, una mujer no vacunada que viajó a Egipto vía Turquía. Además, Reino Unido notificó otros dos casos de ómicron este sábado, Alemania otros dos e Italia uno.