Scotland Yard ha dado carpetazo a la investigación sobre las fiestas celebradas en Downing Street y otros edificios gubernamentales durante la pandemia de Covid tras multar a 126 personas, entre ellas a Boris Johnson. Desde Downing Street confirman que el primer ministro británico no recibirá más multas. Tampoco su mujer, Carrie Johnson.
Ambos ya figuraron entre los sancionados previamente por Scotland Yard por su participación, en junio de 2020, en una fiesta "sorpresa" que Carrie organizó en la oficina de su marido para celebrar el 56 cumpleaños del dirigente tory.
La Policía Metropolitana de Londres ha confirmado que se hallaron indicios de que se violaron las restricciones impuestos por la Covid en fiestas y reuniones celebradas en, al menos, ocho fechas diferentes. De las personas multadas, 28 de ellas han recibido entre dos y cinco multas. Del total de sancionados, 53 son hombres y 73 mujeres, según precisó la Policía.
Entre 24 y 60 euros
Boris Johnson, que se encuentra en el centro del escándalo, ha abonado una multa de entre 24 a 60 euros, si bien Downing Street ha descartado que la Policía vaya a tomar más medidas similares en contra del primer ministro.
En el caso del primer ministro, Johnson había indicado anteriormente que no creyó que haber celebrado su 56 cumpleaños -en un encuentro "sorpresa" organizado por su esposa- en su oficina suponía una violación de las normas del coronavirus, aunque "aceptaba humildemente" que sí las había quebrado.
La conclusión de la denominada Operación Hillman allana el camino a la publicación de la otra investigación paralela que ha llevado a cabo la alta funcionaria Sue Gray, quien había avisado de que esperaría a la conclusión de la pesquisa policial para divulgar su informe completo sobre los hechos.
En este sentido, según la BBC, la publicación de ese documento podría producirse la próxima semana.