El Gobierno de Hungría ha impuesto vía decreto que antes de abortar toda mujer deberá escuchar obligatoriamente el latido del corazón del feto.
Según el texto, firmado por el Ministerio del Interior, la mujer deberá presentar un informe emitido por un ginecólogo-obstetra, en el que conste que ha recibido toda la información sobre los signos vitales del feto, incluido el latido de su corazón. La ley entrará en vigor este viernes.
La ley del aborto de Hungría data de 1992 y permite el aborto hasta la semana 12. Hasta esa fecha abortar es libre sin necesidad de requisitos más que la decisión de la mujer. Sin embargo, en determinadas circunstancias, el límite se puede ampliar a 18, 20 o 24 semanas.
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Política pronatalista
Con este decreto, el Gobierno del ultranacionalista Viktor Orbán obligará desde este viernes a que las mujeres que quieran abortar escuchen antes los signos vitales del feto.
Ante esto y con un decreto no consensuado con ninguno de los partidos, el izquierdista Coalición Democrática ha exigido al Gobierno si prepara o no una modificación de la Ley del Aborto.
Orbán ya se ha mostrado en varias ocasiones contrarias a esta ley y muy restrictivo en los tiempos, pero hasta ahora no había modificado esta norma.
Desde 2017, el Gobierno de Orbán ha implantado una nueva política familiar en Hungría con el Plan de acción de protección familiar, que proporciona, por ejemplo, un impuesto fijo y asignaciones familiares para aumentar las tasas de natalidad en Hungría.
Con esta política pronatalista, los hospitales tienen el derecho a negarse a practicar abortos y el Gobierno está poniendo en marcha campañas contra el aborto en el transporte público y en las escuelas. Esas campañas son una violación de las reglas de la Unión Europea con respecto al programa de financiamiento que recibe Hungría.
Aborto hasta la semana 12
En Hungría se permite abortar hasta la semana 12 y un embarazo puede interrumpirse en cualquier momento si el feto está afectado de manera letal. En este caso hay asesoramiento obligatorio y un período de espera de tres días.
El embarazo se puede extender a 18 semanas si la salud de la mujer está en grave peligro o es el resultado de una violación y que, sumado a esas condiciones, la mujer no estaba al tanto de su embarazo antes debido a una condición médica o un error de una institución. Para extenderlo a 24 semanas, el feto debe tener un 50% de riesgo de presentar una malformación genética o teratológica.