La OTAN necesita "aumentar la producción de armas" para apoyar a Ucrania a largo plazo

La OTAN no se cansa de repetir que no es ni quiere ser parte de la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania. Al mismo tiempo, los aliados presumen de que su apoyo al Gobierno de Volodímir Zelenski está jugando un "papel clave" en la victoriosa contraofensiva de Kiev. En la reunión ministerial que concluye este jueves en Bruselas, los 30 Estados miembros (más Suecia y Finlandia, que tienen el estatus de invitados) se han comprometido a acelerar la entrega de armamento a Ucrania.

Ahora mismo, la principal demanda del Gobierno de Zelenski a la OTAN es el envío de sistemas de defensa aérea con el fin de proteger a Kiev y al resto de ciudades de los bombareos indiscriminados que el Kremlin ha relanzado esta semana. Una nueva escalada bélica que el presidente ruso, Vladimir Putin, ha justificado por el ataque "terrorista" contra el puente de Crimea.

En el encuentro de Bruselas participa el ministro de Defensa de Ucrania, Oleksii Reznikov. "El principal punto en la agenda es el fortalecimiento de la defensa aérea de Ucrania", ha escrito en su cuenta de Twitter. El propio Zelenski reclama "avances de nuestros socios en el tema de la defensa aérea y antimisiles y acuerdos sobre nuevos suministros de otras armas y municiones que necesitamos".

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"La máxima prioridad (de la reunión) será más defensa aérea para Ucrania", ha señalado el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. "Todos hemos visto por qué esto es importante: los horribles e indiscriminados ataques contra ciudades ucranianas, los civiles muertos y las infraestructuras civiles destruidas o los bombardeos contra los sistemas energéticos, especialmente graves ahora que se acerca el invierno. Todo esto demuestra la necesidad urgente de más defensas aéreas para Ucrania", sostiene Stoltenberg.

El primer paso lo ha dado Alemania, que esta misma semana ha entregado a Kiev un primer sistema de defensa aérea IRIS-T, y ha prometido otros tres adicionales para el año que viene. Se trata de "un apoyo muy importante para Ucrania en la lucha contra los ataques con misiles, contra este terror al que está sometida la población", ha indiciado la ministra alemana de Defensa, Christine Lambrecht.

También Estados Unidos ha prometido enviar lo antes posible un sistema de defensa aérea NASAMS, uno de los más avanzados que ha recibido Kiev en los últimos meses. "A pesar de los nuevos ataques de Putin, las fuerzas ucranianas han cambiado la dinámica de esta guerra. Han liberado cientos de pueblos de la ocupación rusa. Y han retomado miles de kilómetros cuadrados de su tierra", ha destacado el secretario de Defensa norteamericano, Lloyd Austin.

"Estas victorias pertenecen a los valientes soldados de Ucrania. Pero los esfuerzos de asistencia, capacitación y sostenimiento en materia de seguridad del Grupo de Contacto (de apoyo a Ucrania) han sido vitales. Hemos hecho un gran progreso al trabajar juntos", afirma Austin.

También Francia acelerará el envío de armamento a Ucrania. "Vamos a entregar radares, sistemas y misiles (antiaéreos) para proteger a los ucranianos de los ataques, en particular para protegerles de ataques de drones", ha anunciado Emmanuel Macron este miércoles en una entrevista en France 2. El presidente francés ha prometido además otros seis cañones Caesar para Kiev.

"Los aliados han suministrado defensas aéreas, pero necesitamos más. Necesitamos diferentes tipos de defensas aéreas: de corto alcance, de largo alcance, para tumbar misiles balísticos, misiles crucero, drones. Diferentes sistemas para diferentes tareas. Ucrania es un gran país, con muchas ciudades, así que debemos aumentar el apoyo para ayudar a Ucrania a defender más ciudades y más territorio contra los horribles ataques de Rusia contra su población civil", insiste Stoltenberg.

Sin embargo, el envío masivo de armamento a Ucrania está provocando un boquete cada vez más importante en los arsenales de los países de la OTAN, que amenaza su defensa. Por eso, los aliados quieren reforzar el diálogo con la industria militar para aumentar la producción y rellenar así las reservas agotadas. 

La ministra de Defensa de Alemania, Christine Lambrecht, durante la reunión de la OTAN de este miércoles Reuters

"Necesitamos aumentar la producción de municiones y armas para garantizar la disuasión y la defensa de nuestros propios aliados, los aliados de la OTAN, pero también para tener suficientes con el fin de seguir brindando apoyo a Ucrania a largo plazo", explica Stoltenberg. "Cuanto más dura la guerra en Ucrania, este trabajo con la industria se vuelve más importante", añade.

Los ministros de Defensa de la OTAN tienen previsto debatir también durante la reunión que termina este jueves en Bruselas cómo reforzar la protección de las infraestructuras esenciales tras los sabotajes en los gasoductos Nord Stream 1 y 2.

"Hemos duplicado nuestra presencia en los mares Báltico y del Norte a más de 30 barcos, apoyados por aviones de patrulla marítima y capacidades submarinas. Cualquier ataque contra la infraestructura crítica de los aliados recibiría una respuesta unida y contundente", apunta el secretario general.

A los aliados les preocupa además la amenaza del presidente ruso de recurrir a las armas nucleares en la guerra de Ucrania. "Hemos transmitido claramente a Rusia que esto tendría consecuencias severas para Rusia. Rusia sabe que una guerra nuclear no puede ganarse y nunca debe librarse. Vigilamos de cerca la postura nuclear de Rusia y no hemos visto ningún cambio. Pero continuaremos vigilando, porque la retórica nuclear de Rusia es peligrosa e irresponsable", ha avisado Stoltenberg.